A. P. G.

El Juzgado de lo penal de Avilés acoge esta mañana dos juicios relacionados con casos de violencia doméstica en los que los presuntos agresores afrontan penas que oscilan entre los cuatro y los dos años y medio de prisión. En el primero de los casos la supuesta víctima renunció a cualquier reclamación mientras que en el segundo la mujer solicitó una orden de protección.

La fiscalía solicita inicialmente para el avilesino J. M. A. D. cuatro años de prisión al imputarle un delito de maltrato habitual, otro de violencia doméstica y un tercero de amenazas. Los hechos por los que hoy se sentará en el banquillo de los acusados se produjeron el pasado 22 de abril cuando, de madrugada, supuestamente golpeó a su pareja sin causarle daños aunque guiado por el propósito de herirla, siempre según la versión de la acusación pública. Posteriormente, y ante varios agentes de la Policía que se personaron en la vivienda, el ahora imputado le espetó a la mujer: «Yo iré a la cárcel, pero cuando salga te voy a reventar...», añade la misma versión.

La fiscalía considera que concurre la agravante de reincidencia. Y es que J. M. A. D. ya fue condenado en 2005 a cuatro meses de prisión por un delito de violencia doméstica y en 2006 a sesenta días de trabajo en beneficio de la comunidad por el mismo delito.

La acusación pública solicita ahora una pena initegral de cuatro años por los tres delitos que le imputa, prohibición de portar armas, así como de acercarse a su pareja, con la que convivía en Avilés, a menos de quinientos metros durante cinco años.

Otro avilesino se sentará esta mañana en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo penal por dos delitos de maltrato en el ámbito familiar y otros de amenazas. Los hechos que la fiscalía imputa a F. J. G. L., de 41 años, se produjeron el pasado 17 de enero, en la vivienda que éste compartía con su compañera sentimental en Avilés. Fue en esa fecha cuando, según la versión de la acusación pública, F. J. G. L. propinó a la mujer un puñetazo en la nariz durante el transcurso de una discusión. El escrito de acusación pública añade que, cuando la mujer intentaba salir del domicilio, el ahora imputado le propinó un puñetazo en el ojo derecho y una patada en la boca, a la vez que profería expresiones como «eres peor que una gitana, te voy a matar».

Tan sólo dos días después, según la misma versión, el acusado siguió a su pareja hasta el parque de Versalles y, ante la negativa de ésta a regresar al domicilio familiar, le dio un puñetazo en el brazo derecho y continuó con las amenazas («Si me denuncias, te mato; yo u otra persona», espetó a la mujer, según la fiscalía). La víctima sufrió varias contusiones de las que tardó cinco días en recuperarse y ha solicitado una orden de protección, según las mismas fuentes. El presunto agresor afronta por estos hechos una pena integral de dos años y medio de cárcel.