El violinista Pablo López Cortina, colaborador en las orquestas «Julián Orbón» y «Los Adioses», se pasa al teclado en la jornada que organiza, mañana, la Caverna de la Bestia. A las 23.30 horas, el músico avilesino aparecerá sobre las tablas como «Singlefinger».

En su «performance» en el local, Cortina impartirá una clase «sobre lo que es música y lo que no». Bastará con uno de los dedos de la mano para reproducir esos sonidos que se conocen como «música comercial». Después, la improvisación hará el resto. «Todo es posible. Pero no es cuestión de magia. Sólo hace falta ver lo que concursa este año en Eurovisión», ejemplificó Cortina.

Esta noche, como ya reza en la programación de la Caverna, dos monologuistas se jugarán el trofeo del concurso «Las noches de la Caverna». Los valientes serán Eduardo y Pedro, quien no pudo competir el viernes pasado por enfermedad.