Soto del Barco, I. PULIDO

Soto recuperó ayer una tradición perdida hace más de quince años: el tradicional desfile de carrozas de San Isidro. Después de tres días de festejos por todo lo alto, los sotobarquenses celebraron el día grande de sus fiestas en honor al patrón de los labradores con una misa solemne, actividades deportivas y una romería que concluyó en torno a la medianoche. Durante la noche del sábado, el recinto festivo fue escenario de una multitudinaria verbena que se prolongó hasta bien entrada la madrugada.

Los sotobarquenses aprovecharon el fin de semana para desquitarse tras el parón experimentado por las fiestas de San Isidro el año pasado. El viernes, las intensas lluvias registradas durante la noche echaron por tierra la primera de las verbenas, amenizada por las orquestas «Tequila» y «Nueva Generación». No obstante, un grupo de «valientes» aguantó el tirón hasta las seis de la madrugada para evitar que decayese la folixa.

Ya el sábado la meteorología brindó una tregua a los vecinos, que protagonizaron una verbena a la que asistieron centenares de personas. Los conjuntos musicales «Acordes» y «Foliada» actuaron como maestros de ceremonias e interpretaron lo mejor de su repertorio hasta el amanecer. Ayer domingo, el programa festivo arrancó a las once y media de la mañana con un desfile de carrozas que recorrió varias calles de Soto. La cabalgata contó con una gran afluencia de público a pesar de que el cansancio ya comenzaba a pasar factura. Y es que el pueblo revivió después de más de una década esta tradición recuperada por la sociedad de festejos «San Pedro» tras haber caído en el olvido. En el desfile tomaron parte cuatro carrozas y un carro decorado con motivos tradicionales. Asimismo, la comitiva estuvo en todo momento escoltada por ocho jinetes a caballo. Acto seguido, los vecinos celebraron en la iglesia parroquial una misa solemne.

Una vez finalizados los actos litúrgicos, los asistentes disfrutaron de un vermú musical amenizado por «Acordes». Horas más tarde, el polideportivo municipal acogió en su cancha un partido de fútbol femenino, que fue antesala de una copiosa pulpada en la pista deportiva. Finalmente, en torno a las nueve de la noche, el conjunto musical «Acordes» se subió de nuevo al escenario para dar inició a una romería que tocó a su fin en torno a la medianoche. Los sotobarquenses cumplieron con el programa hasta el fin.