Comenzaba mayo de 2008 cuando Béznar Arias desenfundó su móvil y puso en marcha la celebración del cumpleaños de Bob Dylan en nuestra villa eligiendo como marco el Club Prensa de LA NUEVA ESPAÑA. Era una iniciativa que buscaba enriquecer la oferta cultural de Avilés y satisfacer a los numerosos admiradores de la obra del bardo de Duluth.

Tras dos ediciones, llegó la hora de celebrar los 69 y, en esta ocasión, nuestra ciudad lo hizo con un Dylan weekend dentro del ciclo Avilés Arte Sonoro, que vino precedido de un amplio eco en los medios de comunicación. El pasado viernes, la sombra de Bob se proyectó desde «El Cafetón», el «Ave Fénix», el «Populart», el «Jazz Ville», el «Padul», el «Lord Byron», el «Trasgu», «La Reserva» y el «Don Floro», donde los coruñeses The Highlights emocionaron mientras aconsejaban a Billy. Todos, locales hosteleros avilesinos en pos de ofrecer algo más que una simple bebida...

La magia de Dylan hizo que se fueran sumando a este primer día locales de forma sucesiva; que el número de solapas con chapas del evento creciera cada hora; que desaparecieran carteles al poco tiempo de colocarlos o que unos tipos al salir de trabajar vinieran desde La Coruña sin ningún ánimo de lucro.

El sábado, la Casa de Cultura reunió a una «troupe» de grandes músicos que pusieron de manifiesto su profesionalidad y la camaradería del rock asturiano, con el maestro radiofónico Jesús Ordovás, emocionado al visitar por primera vez Avilés, a cargo de la presentación y los comentarios sobre la carrera artística de Dylan. Entre el comienzo de Pablo Valdés a pecho descubierto con «Forever Young» y el final, plasmado por esa ametralladora de hacer buenas fotos llamada Manolo Egocheaga, el resto de artistas Sara Moritán, la Joan Báez del recital, Toli Morilla, Stormy Mondays, Edu Vázquez, Tete Bonilla, Juanjo Mintegui, Maurizos, Nacho García, Igor Paskual y The Highlights, ofrecieron fantásticas versiones del inmenso repertorio dylanita, apoyados por un equipo de sonido impecable y por la solvencia del técnico audiovisual.

Entre el público, Alberto Toyos, insigne virrey del rock asturiano; el concejal de Cultura avilesino, Román Antonio; Joan Picagnol, del Centro Niemeyer, y todo un espectro de habituales a los conciertos del Auditorio sedientos de buena música.

Se pudo ver a un niño, en torno a los 12 años, disfrutando expresivamente durante el recital y demostrando un gran conocimiento de las canciones de Dylan. La esperanza de que no cese la dura lluvia, lo único que le faltó a un delicioso concierto.

Mr. Zimmerman, happy birthday!