T. C.
Numerosos bares y restaurantes de la ciudad ya han colgado el cartel de completo por las comidas y cenas de empresa y algunos, incluso, tienen lista de espera, como es el caso de La Posada. «Ya tenemos todo el mes lleno, no sólo los fines de semana sino también por semana», explicó Ismael Rodríguez, de Casa Alvarín.
Y es que los hosteleros no notan que por la crisis los trabajadores hayan dejado de juntarse con sus compañeros para festejar la Navidad aunque, eso sí, concertan menús con precios más asequibles. Según los responsables de bares y restaurantes, los precios medios de los menús rondan entre los 30 euros y los 60 euros por persona.
«Ahora se mira mucho más los precios y piden menús más baratos», comentaron responsables de Casa Lin. La carta que se sirve a los comensales en estas fechas suele estar basada en un entrante con embutidos y, luego, carnes y pescados, además de postre.
«El marisco ya no se suele pedir tanto para que se incluya en el menú porque es lo que encarece más los menús», comentó el responsable de Casa Lin.
