Carcedo, Ignacio PULIDO

El Delegado de Gobierno, Antonio Trevín, señaló ayer que las obras de reparación de la carretera N-632, a su paso por el Alto del Praviano y por Carcedo, están a punto de concluir. Trevín afirmó que el tráfico será completamente restablecido en el vial la semana que viene. Los operarios de las empresas encargadas de reparar la vía trabajan en labores de remate.

Los tramos afectados por la «grietona» del Alto del Praviano -surgida hace más de dos años- y el socavón de Carcedo, originado durante el temporal de lluvias del mes de junio, ya han sido reparados y asfaltados. Según las previsiones del Delegado de Gobierno, todo apunta a que las obras de reparación culminen con carácter inminente. «Las dos obras de emergencia en el Alto del Praviano y Carcedo quedarán concluidas a finales de esta semana», subrayó Trevín, que continuó añadiendo que «serán inauguradas, para su normal funcionamiento, la semana que viene».

Antonio Trevín hizo referencia a las «dificultades» que supuso afrontar la reparación de la carretera N-632. «Fue complejo dada la situación económica que se vive en el ámbito del Ministerio de Fomento para carreteras conseguir los fondos que permitiesen además una adjudicación rápida», matizó. Prosiguió señalando que «dentro de lo que cabe las obras no encontraron dificultades especiales independientemente de que en el Alto del Praviano la geología del terreno fue un importante handicap». Del mismo modo, el Delegado de Gobierno advirtió de que «las labores concluirán antes de lo previsto».

Los cortes de la carretera N-632 en el Alto del Praviano y en Carcedo han generado durante los últimos meses un profundo malestar entre sus usuarios, los vecinos y los empresarios de la zona. Sin ir más lejos, algunas de las empresas afincadas en los alrededores del vial han visto reducida su actividad económica incluso por debajo de la mitad de los niveles habituales.

El hundimiento de la carretera en las inmediaciones de la estación de «El Águila», como consecuencia del temporal de lluvias registrado durante el pasado mes de junio, supuso el golpe de gracia para la zona y pusó en jaque a varios pueblos como La Ferrería, Carcedo o Santiago del Monte, cuyos lugareños manifestaron públicamente en noviembre su descontento por la demora en el inicio de las obras reparación. Ahora, tras la construcción de una escollera de contención en Carcedo y la modificación del trazado de la carretera a la altura de la curva de La Hucha, parece ser que la pesadilla llega a su fin. Durante la tarde de ayer, lo operarios encargados de reparar el vial trabajaban ya en labores secundarias tales como el pintado de las marcas viales.