Ex ministro, jurista y escritor

La Granda (Gozón), Elisa CAMPO

José Manuel Otero Novas, jurista presidente del Instituto de Estudios de la Democracia de la Universidad CEU San Pablo y ex ministro de Presidencia y Educación en la etapa de UCD, intervino ayer en los cursos de La Granda con una ponencia titulada «¿Son las leyes electorales causa de los déficit democráticos?».

-Hábleme de la crisis económica. ¿Cómo ve el panorama?

-El panorama es muy malo. Probablemente en octubre regresaré para presentar en el Club de Prensa de LA NUEVA ESPAÑA mi nuevo libro, en el que dedico un capítulo a la crisis económica. Yo creo que no es tamos enfocando bien la crisis económica, y no digo sólo en España sino en todo el Occidente. Teníamos que ser conscientes de que estamos viviendo todavía por encima de nuestras posibilidades, que tenemos que sacrificarnos todos, no sólo los pensionistas o los jubilados, para empezar un crecimiento más sano. Creo que la crisis actual económica se parece mucho a la de 1929 y no quiero ponerme trágico pero la de entonces fue la que desencadenó la II Guerra Mundial porque no se encontró otra solución antes, y fue la guerra la que nos hizo bajar el nivel de vida para reiniciar un crecimiento más sano.

-No estará diciendo que se avecina una guerra...

-Lo que digo es que aquella crisis acabó así. Ahora no veo que se afronte la crisis de verdad. Y si no lo hacemos, se volverá al equilibrio de otra manera. Por ejemplo, es como cuando en verano hay unos días de calor y la naturaleza misma lo soluciona con una tormenta, que es lo que hace que se vuelva al equilibrio. Si no corregimos las causas de la crisis llegará la tormenta, la naturaleza vuelve al equilibrio.

-Eso tendría un coste.

-Sería a costa de lo que sea. Realmente estoy muy preocupado por la crisis económica y me gustaría que se buscaran soluciones pero no lo veo. Y con esto no critico a los políticos, a lo mejor yo haría las mismas tonterías que ellos están haciendo, no sabes qué hacer y no quieres dejar que el pánico se extienda. Se están haciendo cosas no adecuadas e, igual que ocurrió con la crisis del 29, contradictorias. Por ejemplo en España se lanza el plan E y ahora se hace exactamente lo contrario. En 12 meses hemos cambiado de una solución a la contraria. El Gobierno no sabe lo que hacer.

-La gente se niega a más recortes. Basta ver el ejemplo de Grecia, con protestas en la calle por los ajustes...

-Hay un fallo que tenemos, que es por culpa de nuestra entrada en la Unión Europea y en el Euro. Y es que tendríamos una solución para hacer un sacrificio general, la devaluación de la moneda, pero ahora ya no podemos devaluarla. Es lo único que permite una rebaja del nivel de vida aceptada por todos y que además produce efectos inmediatos, mejora nuestras exportaciones y el turismo en España. La gente acepta mejor la devaluación de la moneda que la rebaja de un sueldo.

-Parafraseando el título de su ponencia, ¿son las leyes electorales causa de los déficit democráticos?

-La teoría que yo expongo es que las leyes electorales nos distancian del funcionamiento de la democracia. Pero hay otras cosas que nos distancian aún más. No estamos viviendo en una dictadura pero tampoco en una democracia.

-¿Y eso por qué?

-¿Estamos en una democracia porque cada cuatro años podamos elegir entre cuatro nombres? Yo no lo creo, eso no es soberanía del pueblo. Aunque los partidos son necesarios, favorecen el caudillismo. Y también los medios de comunicación distorsionan la democracia e impiden que el pueblo conozca la información que realmente necesita. El dinero es otro factor distorsionante... No obstante, aunque hay muchos razones por las que no vivimos realmente una democracia, eso no me impide apoyar el sistema. Prefiero este régimen, del que yo también soy autor, a una dictadura.