Francisco L. JIMÉNEZ

La tormenta que desatada el pasado mes de octubre en el seno de la cofradía de pescadores de Avilés por el control de la entidad va a peor. Lo que primero fueron escarceos dialécticos entre las dos facciones que pugnan por la presidencia desembocó luego en la anulación de las elecciones por orden del Principado -está pendiente la repetición de los comicios- y se tornan ahora graves acusaciones contra el ex presidente, Gregorio López, y su equipo directivo por una supuesta opacidad económica que habría hecho «evaporarse» al menos tres millones de euros, según las cuentas de los armadores autodenominados «críticos» con la gestión de López.

Los pescadores y armadores alineados con la facción que quiere desalojar a Gregorio López de la presidencia de «Virgen de las Mareas» han tenido conocimiento, por boca de miembros de la gestora que nombró el Principado para tutelar la Cofradía mientras se convocan nuevas elecciones, de presuntas irregularidades económicas que, según aseguran, «confirman las sospechas más pesimistas que teníamos: la Cofradía está en situación de quiebra económica».

Según los «críticos», la gestión de Gregorio López sólo puede ser calificada como «desastrosa» y se caracterizó por «despilfarrar» los pocos recursos que genera la Cofradía. En un comunicado que ayer hicieron público, estos armadores y pescadores llama la atención sobre el hecho de que se paguen 72.000 euros anuales por prestar un servicio de asesoría que sólo ingresa 15.000 euros. También les llama la atención que el almacén de pertrechos tenga unos gastos, sólo de compra de mercancía, de 51.000 euros al año y facture 55.000. «Estos dos negocios son absolutamente ruinosos para las arcas de la Cofradía y los anteriores gestores tendrán que explicar por qué se prestan y en qué reunión de la junta general se les autorizó a soportar semejantes quebrantos económicos», reza el comunicado. Las denuncias no paran ahí, porque quienes han puesto el punto de mira en Gregorio López ven «exagerado y desproporcionado» el gasto anual de 10.000 euros en teléfono.

Pero el verdadero caballo de batalla de este colectivo era y más que nunca va a seguir siendo ahora exigir explicaciones por las operaciones inmobiliarias realizadas en el barrio del Nodo, propiedad de la Cofradía. «Se han vendido hasta la fecha 95 de las 278 casas del poblado en tres millones de euros. Aparte de que las viviendas se hayan vendido a cualquiera que las quiso comprar, contraviniendo así lo dispuesto por la junta general cuando autorizó esas ventas (deberían haberse vendido sólo a los socios de la Cofradía o a inquilinos legales de las casas), lo cierto es que todos los créditos avalados con ese patrimonio -por los que se pagan unos intereses anuales de 360.000 euros- siguen pendientes. Los pescadores y los armadores queremos saber dónde está el dinero, ya que no figura en las cuentas corrientes de la Cofradía», manifiestan los líderes del «sector crítico».

Gregorio López ha venido asegurando en los últimos meses, como réplica a las insinuaciones sobre su gestión económica, que existían auditorías. «Miente», afirman los armadores opositores a su gestión. «Ni en el año 2010 ni en 2011 -cuando más casas se vendieron, curiosamente- se han hecho auditorías, precisamente porque los directivos de la entidad pusieron como disculpa la delicada situación económica», critican los armadores que, a su vez, anuncian el encargo de una auditoría «exhaustiva e inmediata».