F. L. JIMÉNEZ
El secretario general del PSOE avilesino, Álvaro Álvarez, le tenía «ganas» al presidente del Puerto, Raimundo Abando, desde que éste comenzó a hacer valer su cargo para hostigar a los socialistas por su comportamiento en asuntos como el Centro Niemeyer y ayer, ya pasadas las elecciones autonómicas y con un escenario más favorable para el PSOE que hace diez meses, abrió la veda contra el dirigente portuario de Foro Asturias acusándole de haber accedido ilegalmente a la presidencia del Puerto, de adjudicación irregular de contratos públicos, de haber aprovechado los recursos portuarios para hacer campaña en favor del partido de Álvarez Cascos en la jornada previa al día de reflexión electoral y de tener una biografía profesional «incompatible» con el cargo que ocupa. Un ataque en toda regla que, según Álvarez, no ha hecho más que empezar «porque se amontona el material que pone en duda la validez de Abando como presidente del Puerto de Avilés».
Por partes. Según Álvaro Álvarez, «el rey de la transparecencia y guardián de la pureza (en referencia a Raimundo Abando), accedió a la presidencia de la Autoridad Portuaria de Avilés siendo socio y ocupando un cargo de responsabilidad en la consignataria Marítima del Principado, que opera en los muelles locales. La incompatibilidad es manifiesta y aunque Abando cesó en sus funciones empresariales tiempo después, ¿qué trato cabe esperar ahora del presidente del Puerto hacia Marítima del Principado tras haber tenido hasta ayer relaciones profesionales e interés personal en ella?».
A lo anterior, según el máximo responsable socialista en Avilés, se suma otro hecho «inquietante» como sería la salida de Abando «por la puerta de atrás» de dos empresas marítimas en las que trabajó durante los últimos años de su periplo profesional. Esas empresas también operan en los muelles locales, y según Álvarez «es evidente que tras una ruptura tensa de relaciones debe existir una animadversión mutua». Es decir, que para el líder de los socialista de Avilés «la biografía profesional de Raimundo Abando no es la adecuada para presidir este puerto».
Más leña al fuego. Álvaro Álvarez denunció en la junta electoral la presentación en público, el pasado viernes, de los proyectos ganadores del concurso para reformar la antigua rula e instalar equipamientos hosteleros en el paseo de la ría. «Una cosa es que el trabajo en el Puerto no se detenga por las elecciones y otra muy diferente hacer presentación pública de ese trabajo con evidente intención electoralista», afeó el dirigente socialista, quien también advierte a Raimundo Abando de que «va a tener que explicar por qué ha adjudicado el contrato de seguros del Puerto a una determinada empresa sin concurrir las necesarias condiciones de concurso e igualdad de oportunidades».
