Francisco L. JIMÉNEZ

Las palabras del Ministro de Industria, José Manuel Soria, garantizando una tarifa eléctrica que evitaría la marcha de Asturias de empresas como Alcoa, AZSA o Arcelor, no dejaron indiferente a los agentes sociales y políticos de la región, si bien sus reacciones son dispares y van de la «extrema satisfacción» del PP a las «cautelas» con que se expresan la alcaldesa de Avilés, Pilar Varela, y el presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Severino García Vigón. Entre unos y otros, el comité de fábrica muestra su optimismo por la cercanía del fin de esta crisis eléctrica y expone nuevas preocupaciones, como por ejemplo qué compromisos está dispuesta a asumir ahora la multinacional Alcoa.

El PP avilesino no tiene dudas del desenlace feliz que tendrá la negociación entre el Ministerio de Industria y las grandes industrias consumidoras de energía eléctrica de cara a conseguir una tarifa competitiva para éstas. «Tanto el Presidente, Mariano Rajoy, como el ministro José Manuel Soria han considerado este asunto como una auténtica prioridad y han volcado sus esfuerzos en la búsqueda de una solución duradera para el problema», manifestó ayer el PP en un comunicado.

Los populares dicen «apostar inequívocamente por consolidar el sector industrial, clave para nuestra comarca al concentrar a las grandes multinacionales dependientes del precio de la luz y que fue dejado en el aire por el anterior gobierno socialista al haber prorrogado sólo por dos años la solución trasladando el problema al gobierno siguiente».

Desde el PP de Avilés se hace además un llamamiento al resto de partidos políticos, a los agentes sociales y a las autoridades de la comarca para que no se sumen a algaradas (en clara alusión a la manifestación convocada para el próximo día 8), sino a contribuir a que la negociación termine de la mejor manera posible para el mantenimiento del tejido industrial de la comarca evitando así tensiones artificiales que en nada van a contribuir al futuro, salvo para la mera satisfacción partidista de unos pocos».

Pilar Varela, que además de apoyar la citada manifestación pide a la ciudadanía que acuda a ella, juzgó como «positivo» el anuncio que hizo el Ministro de Industria en las instalaciones de Alcoa en Galicia. No obstante, «abordo la cuestión con cautela porque es necesario que se confirmen las garantías que dio Soria y se despejen de una vez por todas las incertidumbres en las que hoy nos encontramos».

La cautela de Varela tiene que ver, entre otras cosas, con que el 15 de marzo, en el Congreso, la presidenta del PP de Asturias, Mercedes Fernández, y el Ministro de Industria se reunieron con las grandes empresas consumidoras de energía eléctrica y dijeron entonces que se comprometían a resolver el problema de la tarifa eléctrica. «Estamos a 3 de octubre -el 31 de diciembre cada vez está más cerca-- y es necesario pasar ya a los compromisos concretos. El 15 de marzo estábamos en campaña electoral en Asturias y espero que el anuncio de ayer (por el martes) no tenga nada que ver con las proximidad de las elecciones gallegas».

El presidente de la FADE, Severino García Vigón, recibió con «satisfacción» el anuncio del Ministro de Industria de que España dispondrá en enero de un sistema capaz de garantizar la competitividad energética de las grandes empresas. No obstante, el presidente de los empresarios asturianos pide «concreción y rapidez en la toma de decisiones» y manifiesta su deseo «de que esto no se quede en un mero anuncio, en una faena de aliño, puesto que el tiempo apremia y no valen soluciones de hoy para mañana».

En la fábrica avilesina de Alcoa comienzan a ver la botella medio llena después de muchos meses acogotados. José Manuel Gómez de la Uz, presidente del comité de empresa y una de las personas que tuvo ocasión de reunirse el martes con el ministro de Industria en la factoría de San Ciprián, da crédito a las palabras de Soria: «Algo muy gordo tendría que pasar para que no salga adelante un acuerdo sobre la tarifa eléctrica después de lo que dijo ayer (por el martes) el Ministro».

Claro que, despejada parcialmente una incertidumbre, a los sindicalistas de Alcoa les surgen otras: «La pelota pasa a estar en el tejado de la empresa y lo que nos preguntamos ahora es qué quiere hacer Alcoa a partir de enero con la fábrica de Avilés. Por eso hemos pedido entrevistarnos con el presidente de la compañía para España a fin de aclarar todo lo relativo a inversiones y puesta de nuevo en funcionamiento de las máquinas», explicó Gómez de la Uz. La fábrica avilesina de Alcoa trabaja actualmente al 50 % de capacidad por la caída de demanda mundial de aluminio y la mitad de su plantilla está regulada por un ERE.

«Lo que interesa ahora a los trabajadores es conocer los planes de Alcoa para la fábrica»

<José Manuel Gómez de la Uz >

Presidente del comité de Alcoa

«El tiempo apremia y en este asunto no valen soluciones de hoy para mañana»

<Severino García Vigón >

Presidente de la FADE