Francisco L. JIMÉNEZ
Con el agua al cuello. Así están las finanzas de muchas comunidades de vecinos de Avilés, ahogadas, valga la redundancia, por el imparable encarecimiento del recibo del agua, que también incluye conceptos tales como el alcantarillado, la basura y el canon de saneamiento. Y es que, para ciertos tramos de consumo elevado, el precio del recibo trimestral de agua ha subido más de un 75 por ciento desde 2010. Una familia que tenga un consumo medio de agua doméstica de 30 metros cúbicos por trimestre -una cifra «de lo más habitual», según expertos en la materia consultados por este diario- pagaría hoy un 25 por ciento más que hace tres años. Los únicos beneficiados por los cambios aplicados en la normativa reguladora del cobro del agua han sido los consumidores que están por debajo de 20 metros cúbicos trimestrales -«una minoría, según las mismas fuentes-, pues en su caso el recibo se ha abaratado un 25 por ciento aproximadamente.
Los gestores de fincas urbanas y los administradores de comunidades de vecinos, varios de los cuales fueron consultados ayer para la realización de esta información, están atónitos por la progresión de precio que lleva el recibo del agua en Avilés, un fenómeno que algunos de ellos asocian a la privatización del servicio en 2009 y otros, sencillamente, a la «voracidad recaudatoria de las administraciones». Ordenanzas en mano, lo que explica el incremento del coste del agua son dos hechos: la implantación en 2011 del nuevo canon de saneamiento (que ahora se calcula mediante la suma de una cuota fija y otra variable, según consumo de agua) y la reducción de cuatro a tres de los tramos que gradúan el precio de cada metro cúbico de agua consumido (la supresión de un tramo implica que sean más los domicilios cuyo consumo de agua se grava a precios superiores a antaño).
En cualquiera de los casos, los gestores de comunidades avisan de que cada vez son más los vecinos que preguntan a qué se debe el encarecimiento de su factura trimestral del agua: «Cuando a esas personas les explicamos con detalle de dónde vienen esas subidas de precio hay dos reacciones, los que ponen cara de desconfianza y los que no disimulan su cabreo con el Ayuntamiento».
Un hogar tipo avilesino gasta, de media, 30 metros cúbicos de agua cada trimestre. En 2010, ese consumo implicaba un coste de 48,28 euros; en tres años esa cifra se ha elevado a 60,78 euros. «Como les digo a mis clientes, ahora te cobran por mirar el grifo... y por usarlo», bromea un administrador de fincas.
