Myriam MANCISIDOR

Un hombre de 21 años y natural de Gijón que responde a las iniciales R. L. R. fue detenido el pasado sábado por la tarde después de que un grupo de personas alertara de que estaba realizando el pago de una consumición en un establecimiento hostelero de la plaza de Pedro Menéndez con un billete falsificado de veinte euros. Los agentes de la Policía Local se desplazaron al local, donde identificaron y cachearon al joven. En un bolsillo de la cazadora, los agentes hallaron varios billetes falsos, todos ellos de veinte euros, según fuentes próximas a la investigación. El resto del dinero que portaba R. L. R. -en billetes de cinco y diez euros, auténticos- se correspondía con el importe que supuestamente había estafado a lo largo de la tarde en Avilés.

Así, R. L. R. además de intentar «colar» un billete falso en un bar también adquirió una flor en un comercio próximo a la plaza de Pedro Menéndez que pagó con el papel falsificado. El cambio que recibió por parte del dependiente, en cambio, era de curso legal. Realizó también, siempre según voces policiales, hasta seis «trayectos cortos» en taxi por Avilés. Cada uno de estos viajes los pagó con billetes de veinte euros falsos para hacerse así con la devolución de cada carrera.

La detención de R. L. R. fue posible, según los agentes de la Policía Local de Avilés, gracias a la cooperación ciudadana. «Los billetes falsos no pasaban el filtro de los detectores ultravioletas pero estaban muy bien hechos», recalcaron fuentes policiales, que aconsejaron extremar las precauciones para evitar sucesos de este tipo en establecimientos comerciales.

El Banco Central Europeo recomienda «tocar, mirar y girar» los billetes de euro para reconocer que son de curso legal. Estos cumplen ciertos requisitos como impresión en relieve, marcas de agua, banda iridiscente o la imagen cambiante de la banda holográfica.