La asociación protectora SOS Gatos de Avilés agradece la ayuda que han prestado varios agentes de la Policía Local y de la base local de Bomberos de Asturias en el rescate de una gata que quedó encerrada en una casona abandonada de la calle Las Alas, cerca de la plaza de Carlos Lobo. La gata llevaba varios días maullando desesperada sin agua ni alimento, según los miembros de la protectora, y no podía salir desde que la pasada semana se tapiaron las puertas de acceso al inmueble, ya que alguna había sido forzada recientemente.

La gata salvada de una probable muerte por inanición tiene una pequeña marca en la oreja, lo que indica que fue una de las esterilizadas por la protectora SOS Gatos y que forma parte de la colonia gatuna que habita en las inmediaciones de la calle de Las Alas, un grupo de mininos controlado y donde la inmensa mayoría de las hembras están esterilizadas para evitar la proliferación.

SOS Gatos aprovecha lo ocurrido para solicitar ayuda del Ayuntamiento de Avilés al objeto de poder continuar con su labor de contriol de la población de gatos, ya que "nuestros recursos son limitados". Los gatos, según recalca la asociación protectora, son propiedad municipal y deben ser esterilizados y devueltos a su lugar de origen como indica la Ley de Protección Animal del Principado de Asturias 13/2002 de 23 de diciembre en su artículo 19. "El método CES (capturar-esterilización-soltar) es el más efectivo para mantener el número de gatos controlado. Tradicionalmente se ha controlado a los gatos callejeros atrapándolos y matándolos, un método tan salvaje como ineficaz, concluye la nota de prensa que hizo pública SOS Gatos.