El gobierno regional expresó ayer su "inquietud y preocupación" por la continuidad de Alcoa en Avilés y por "la incertidumbre" en la que viven las familias de los trabajadores de la factoría asturiana tras la última subasta de energía eléctrica y culpó directamente al Ministerio de Industria. El portavoz del ejecutivo asturiano, Guillermo Martínez, lamentó "la irresponsabilidad del gobierno central " ante una situación de la que, recalcó Martínez, "lleva avisando el gobierno regional desde hace más de un año". El consejero de Presidencia recordó que el Principado había sugerido cambiar el sistema actual de subasta por un marco que diera estabilidad al mantenimiento de la actividad de los grandes consumidores de energía eléctrica, como es el caso de Alcoa, con un precio que resultase competitivo.

El consejero de Presidencia y portavoz del gobierno culpó de las dudas sobre la continuidad de la plante avilesina de Alcoa al Ministerio de Industria y llamó la atención acerca de que la plantilla "no puede vivir bajo una angustia permanente; el respeto a los trabajadores y a sus familias exige claridad". También anunció que el Principado trasladará este malestar en la reunión prevista para la próxima semana en Madrid entre el consejero de Industria, Francisco Blanco, y el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, en la que el Ejecutivo asturiano exigirá un cambio en la política energética.

Guillermo Martínez reclamó un posicionamiento claro a la presidenta del PP en Asturias, Mercedes Fernández, sobre esta cuestión al tiempo que la emplazó a mantener una postura muy distinta a la que tuvo ante el conflicto de la minería. "A ver si se atreve a dar la cara, aunque sea por una vez, por los puestos de trabajo de los asturianos, algo que no hizo con la minería", manifestó el portavoz del Gobierno regional, que le recomendó fijarse en el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, por su apoyo a los mineros. "Si tiene miedo a perder su cargo, tome ejemplo del presidente de Castilla y León, que sigue teniendo su puesto pese a atreverse a discrepar".

Para la diputada Carmen Maniega (PP), la reunión que mantendrá la próxima semana en Madrid Francisco Blanco con el secretario de Estado de Energía llega tarde. "Esa reunión, una vez celebrada ya la subasta eléctrica, aporta más bien poco. ¿A qué está esperando el Consejero de Industria para sentarse con Alcoa y pedirle que ponga sobre la mesa un plan industrial? El Consejero llega tarde y no atina", criticó la diputada avilesina.

Para Maniega la crisis de Alcoa requiere del diálogo entre las partes y de la búsqueda de soluciones en conjunto. "Si no detectamos el problema y las necesidades reales de la empresa, las soluciones que se planteen no serán las adecuadas. La solución pasa por sentarse todos a la mesa y pedir a la empresa que aclare qué necesita para la viabilidad de la planta. Y también pasa porque Alcoa presente un plan industrial. Una vez con todo eso veremos cómo se puede ayudar desde las administraciones. Lo que no puede ser es que mientras todos estamos exigiendo a Alcoa un compromiso, el Consejero se quede al lado de la empresa haciéndole el caldo gordo", protestó.

La diputada del PP incidió en que si la luz es cara en España, no es por culpa del Gobierno de Mariano Rajoy, sino por la herencia socialista: "Entre 2003 y 2011 subió el precio un 67%, un promedio anual del 5,9% que en 2011 supuso que tuviésemos la energía más cara de Europa. No creo que el Consejero (de Industria) ni el PSOE puedan dar lecciones de política energética", concluyó Maniega.