La Semana de la Tapa crece en aceptación. La décima edición de estas jornadas gastronómicas organizadas por la Unión de Comerciantes de Avilés y Comarca (Ucayc) concluyó ayer con éxito de ventas en la mayoría del casi medio centenar de establecimientos participantes. El encuentro que comenzó el pasado lunes, día 7, dejó de manifiesto que a los avilesinos les gusta salir a tapear, visitar diferentes locales y degustar pequeños bocados, unos con sabores de la cocina tradicional y otros cargados de innovación.

"Hemos vendido mucho más que el año pasado; hubo momentos que no dábamos abasto", apunta un hostelero satisfecho con la dinámica que mantuvo en los últimos siete días, sobremanera durante las dos primeras jornadas de la semana -el lunes 7 y el martes 8- y el recién concluido fin de semana. Reconoce que estos encuentros no reportan ganancias económicas importantes "pero sirven para sacar a la gente de casa, atraerla al bar y dar a conocer lo que hacemos", añade.

Los clientes se sumaron al certamen atraídos por diferentes motivos, entre ellos la originalidad de algunas tapas, el reconocimiento público de determinados locales, el precio de cada bocado -entre 1 y 2.50 euros- o la recomendación de un amigo. "El boca a boca funciona muy bien. Si te dicen que la tapa de un bar concreto está rica, vas", señala J. P. Rodríguez desde la barra de un local de la calle Galiana. De hecho, este joven dice haber visitado seis bares, sidrerías y vinotecas de la ciudad. "Mi novia y yo hicimos una pequeña ruta entre el lunes víspera de Covadonga y el viernes pasado. Cenamos de tapas, nos gustó mucho y de paso participamos en el sorteo. Ojalá tengamos algún premio", añadió.

Una pequeña guía recogía la relación y dirección de los establecimientos adheridos a la Semana de la Tapa. Además, para identificarlos, cada local situó en una zona visible un cartel con el nombre de la tapa que ofertaba. Algunos ofrecieron dos, permitiendo así a los clientes elegir diferentes sabores y texturas.