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La senda fluvial del Raíces, en penumbra

Los usuarios piden el arreglo de los caminos de madera, la reposición del alumbrado y cámaras de seguridad para evitar robos

El suelo deteriorado de las pasarelas de madera de la senda fluvial. MARA VILLAMUZA

Los usuarios de la senda fluvial del río Raíces entre Piedras Blancas y Salinas han reclamado obras de mantenimiento y la instalación del alumbrado público. Los usuarios sostienen que el paseo, que cuenta con una gran afluencia de personas durante todo el año tiene las pasarelas de madera muy deterioradas. "La madera de los caminos está en muy mal estado y es peligrosa para caminar porque resbala sobre todo si se moja con la lluvia. Hay tramos donde las traviesas están rotas y otros con musgo por la falta de mantenimiento", señaló un usuario.

El paseo, además carece de alumbrado público desde hace años debido a los robos del cable eléctrico. Asimismo, los bancos y papeleras están en mal estado, al igual que los elementos que contenían las farolas, que también son de madera, afirmaron los usuarios. "Se debería de buscar una solución para reponer el alumbrado público con algún sistema que impida los robos de los cables eléctricos y también con farolas antivándalos", sostiene los paseantes. Por la senda pasamos peatones y también ciclistas, es una zona agradable para desplazarse entre Piedras Blancas y Salinas, pero debería reponerse el alumbrado público", afirman.

La falta de luz resta usuarios sobre todo en los meses de otoño e invierno con menos horas de luz al día y además facilita los robos y los actos vandálicos por la oscuridad que reina en la zona.

La senda fluvial que comunica peatonalmente las dos localidades castrillonenses se inauguró en 2007 y tiene una longitud de 1,6 kilómetros. En las obras se invirtieron 1,5 millones de euros que aportaron la Confederación Hidrográfica, el Principado y el Ayuntamiento de Castrillón. El Ayuntamiento es el responsable de la limpieza y mantenimiento del paseo.

El tramo de senda del Raíces entre Salinas y Raíces Nuevo también carece de luz desde hace años. Los robos y los actos vandálicos han dejado muy deteriorado el mobiliario urbano. Los responsables municipales se niegan a reponer el cableado de las farolas. "Cuesta mucho dinero y las veces que lo repusimos tras los robos nos volvimos a quedar sin él", señaló un responsable municipal.

El tramo del camino por la ribera del río entre Salinas y Raíces Nuevo también padeció el robo de varias tapas de alcantarilla de diferentes tamaños y peso. "No hay luz por el robo del cable y las farolas están totalmente destruidas, la única solución es que se pongan cámaras de seguridad en los tramos con más afluencia de personas. Además es una zona por muy utilizada por los alumnos del instituto de Salinas", afirmaron los vecinos.

Asimismo, a los desperfectos por los actos vandálicos se suman lo que ocasionan los jabalíes que frecuentan los huertos y fincas cercanas amparados en la oscuridad.

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