"Desde mi época a ahora, el Puerto cambió mucho o poco, depende cómo se quiera mirar". Así lo afirma Manuel Ponga, expresidente de la Autoridad Portuaria de Avilés, una de las voces autorizadas para destripar los cien años de historia que van desde la puesta en marcha de la Junta de Obras del Puerto hasta los momentos actuales de vida portuaria en Avilés. Y lo mismo ocurre con Manuel Martín Ledesma, que fue no sólo presidente, sino también director de la Autoridad Portuaria. Ellos dos serán los responsables de la charla-coloquio que, sobre este siglo de historia, organiza el Club LA NUEVA ESPAÑA de Avilés. El acto será a las ocho de la tarde, en el salón de actos de la Casa de Cultura. La asistencia es libre y gratuita.

Según acordaron ambos expresidentes, Ledesma centrará su exposición en el puerto medieval, mientras que Ponga aportará una mirada más actual, especialmente centrada en los nueve años en los que él fue presidente, de 1999 a 2008. Y sin rehuir hablar de futuro: "La ronda norte y la barrera ferroviaria es algo congénito, va con nosotros", bromea sobre la falta de definición de estas dos grandes infraestructuras.

Respecto a los años en los que Ponga fue presidente, él mismo destaca que el cambio fundamental es la existencia de muelles en la margen derecha de la ría. "Fue un proyecto que comenzó conmigo y termina ahora con Santiago Rodríguez Vega. Es cierto que falta una tercera fase, pero supongo que tal y como estamos quedará aplazada". La existencia de ese kilómetro de instalaciones recién inauguradas es, para él, el principal cambio. Y si fuera posible continuar con la tercera fase, sería bienvenida. "No sobra nada".

Según explicó el expresidente, cuando se planteó la obra de la margen derecha, el Gobierno central estaba reacio a la propuesta. "Se habían invertido mucho en La Coruña, y al lado estaba el puerto de Gijón". Pero el momento fue propicio, y el Puerto de Avilés se salió con la suya. Según Ponga, fue un gran acierto. "También se decía que no valía para nada ampliar la margen derecha".

En los nueve años de Ponga al frente de la Autoridad Portuaria "se cambiaron muchas cosas". Y enumeró: "Se hizo un espigón, un muelle nuevo, se amplió el que había, se hizo el paseo de Conde de Guadalhorce, se cedieron los terrenos para la construcción del Niemeyer, el inicio del puerto deportivo, la nueva rula, el traslado de la oficina...". Eso por no contar la escultura "Avilés" del paseo de la ría y la reparación del paseo de San Juan de Nieva, así como el entorno de la playa de San Balandrán y la reparación del faro de Avilés, que acabaría siendo de forma temporal oficina del Niemeyer. "Sí, se han hecho muchas cosas", afirmó el expresidente.

El centenario de la Junta de Obras del Puerto -origen de la Autoridad Portuaria- estuvo salpicado de celebraciones durante todo el año. Por ejemplo, el Ayuntamiento avilesino le entregó la medalla de oro de la ciudad y el Niemeyer acoge la exposición "Portus", sobre la historia de una infraestructura que es capital para entender el pasado y el futuro de la ciudad.