La recuperación de los cursillos de fin de semana en las piscinas del Quirinal ha salvado seis empleos de los que estaban en peligro por las obras de la piscina de La Magdalena. Hoy entra en vigor el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de dos meses que afecta a nueve de los trece trabajadores de la empresa Eulen que dirigen la actividades acuáticas por la tarde y que está justificado por la reducción de la carga de trabajo derivada del aplazamiento de numerosas actividades acuáticas hasta que acaben las obras de La Magdalena. Está previsto que la obra para mejorar el tejado de esta instalación dure unos 40 días.

Tras la negociación de los trabajadores con la empresa, cuatro de los que tienen contrato indefinido quedan fuera del ERTE y solo nueve tendrán una reducción de jornada.