La Policía Nacional de Avilés investiga la quema de un coche en el barrio de La Magdalena. Los agentes sospechan que el fuego, que se extendió a otros tres turismos, fue intencionado y buscan a su autor. La alarma saltó a las 3.35 horas de la madrugada del miércoles a la altura de los números 9 y 11 de la calle Sabino Álvarez Gendín, cuando los vecinos alertaron de que había un vehículo en llamas, un Mini. El incendio se extendió a otros tres turismos que estaban estacionados junto al siniestrado: un Ford Focus, un Ford K y un Citroën Xara. Las primeras hipótesis de la Policía apuntan a que fue un acto intencionado.

Dos establecimientos avilesinos fueron además víctimas de los cacos en la madrugada del miércoles, si bien los ladrones apenas se quedaron botín alguno. El negocio ubicado en el número 36 de la calle Rivero sufrió daños "con una tapa de registro o con una boca de riego" en un intento de robo que se produjo en torno a las seis de la madrugada. Según fuentes policiales, el incidente "más bien parece un acto vandálico". Peor suerte corrieron los propietarios de una tienda de El Pozón, a la que unos cacos accedieron mediante un alunizaje (empotrando un vehículo contra la fachada). La Policía Nacional busca a los sospechosos, que según las primeras indagaciones "apenas se llevaron nada".