Los avilesinos parecen haber olvidado ya la frustración que dejó el sorteo extraordinario de lotería de Navidad, que apenas repartió en la ciudad varias pedreas y seis mil euros para el propietario de un décimo afortunado con un quinto premio, y fían ahora su suerte al sorteo del Niño. La gran concurrencia de gente por la celebración del mercado de los lunes tuvo su reflejo en grandes colas delante de las administraciones de lotería, como la que se aprecia en la imagen, tomada en la calle Carreño Miranda.