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Los pediatras asocian el incremento de las patologías respiratorias con la polución

Los médicos trataron en diciembre, cuando se registraron numerosos picos de contaminación, a más niños que años atrás por bronquiolitis o asma

Los pediatras asocian el incremento de las patologías respiratorias con la polución RICARDO SOLÍS

El aire de Avilés enferma, al menos cuando se disparan las alarmas en las estaciones de medición por un exceso de emisiones. Algunos pediatras de la ciudad asocian el incremento de patologías respiratorias con la contaminación. A falta de estudios rigurosos que reclaman, los profesionales basan sus argumentos en su trabajo diario: en el mes de diciembre, cuando el Principado activó una prealerta por polución, los pediatras detectaron un incremento de niños en las consultas aquejados principalmente de bronquiolitis, bronquitis, bronconeumonías y asma.

"Estacionalmente hay procesos de bronquiolitis u otras patologías respiratorias, pero este año hemos tenido bastantes casos sobre todo en los meses de noviembre y diciembre, hasta Navidad", manifiesta la pediatra Ana Pérez, del centro de salud de Sabugo. Como el resto de colegas, Pérez defiende la realización de estudios amplios que analicen una posible relación directa entre la contaminación y ciertas enfermedades. "Bastaría con comparar los procesos respiratorios que hemos tenido a finales de 2015 con cualquier otro año y comprobar si coinciden con un aumento de las emisiones", subraya. En septiembre, destaca Pérez, los pediatras también registraron varios casos de "debut asmático" en niños de unos cuatro años. "Luego supimos que por aquellas fechas hubo también picos de contaminación", sentencia.

Mónica Mateo, pediatra del centro de salud de Llano Ponte, coincide con su compañera. "En estos momentos estamos viendo los casos habituales en pediatría en lo que se refiere a enfermedades respiratorias, con la lluvia se notó una gran mejoría. Pero antes de Navidad había una patología que no era normal en niños, mucho más alta de lo normal en esta época", reseña. Añade al respecto: "Estuvimos tratando bronquiolitis cuando todavía no había llegado el virus (habitualmente el sincitial respiratorio)". Mateo no dudó en aconsejar a sus pacientes asmáticos cerrar sus casas a cal y canto. "Hubo días que olía mal por contaminación hasta en la sala de espera. Así que a los asmáticos les propuse no ventilar en casa", sentencia esta pediatra que trató enfermedades respiratorias "a casi todos los grupos de edad".

La Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (Seicap) alertó el mes pasado, en la misma línea que los pediatras avilesinos, de que los altos niveles de polución que se registran en muchas ciudades y las infecciones de las vías respiratorias multiplicaron las visitas a urgencias de niños con crisis de asma. En un comunicado, Cristina Ortega, miembro de la Seicap y responsable de la Unidad de Neumología y Alergia Infantil del Hospital Quirón San José de Madrid, incidió en que en las últimas semanas se triplicaron el número de atenciones en urgencias de niños, la mayoría de ellos aquejados de bronquiolitis. El dióxido de nitrógeno, recalcaron desde la Seicap, al igual que otros productos de la combustión de los motores, como el dióxido de azufre (SO2) afecta a las vías respiratorias y agrava los síntomas de aquellos pacientes que están sufriendo episodios de infección de las vías respiratorias.

Los niños con enfermedad respiratoria precisan un tratamiento u otro dependiendo de múltiples factores, y a ser posible siempre bajo la supervisión de un profesional médico. A la contaminación atmosférica por empresas, calefacciones o vehículos, las pediatras de Avilés suman también el humo del tabaco. "La primera contaminación es la del tabaco en casa; por eso es fundamental evitar que los niños sean fumadores pasivos", recalca Ana Pérez sin perder de vista los datos de polución facilitados periódicamente por las estaciones de medición de Avilés. Anteayer los ecologistas hicieron una lectura de los últimos registros y advirtieron de un nuevo "pico" de polución por benceno.

El Colectivo Ecologista de Avilés lleva años pronunciándose sobre los efectos nocivos de la polución para la salud. La Organización Mundial de la Salud advierte en este sentido que la contaminación atmosférica urbana aumenta el riesgo de padecer enfermedades respiratorias agudas, como la neumonía, y crónicas, como el cáncer del pulmón y las enfermedades cardiovasculares. Afecta de distintas formas a diferentes grupos de personas. Los efectos más graves se producen, según la OMS, en las personas que ya están enfermas. Además, los grupos más vulnerables, como los niños, los ancianos y las familias de pocos ingresos y con un acceso limitado a la asistencia médica son más susceptibles a los efectos nocivos de dicho fenómeno.

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