Las posibilidades de un acuerdo presupuestario entre el gobierno local y Somos, el único grupo que mantiene abierta una negociación, se disipan a pasos agigantados. Ayer, fue la formación morada la que pasó al ataque tras la crítica que lanzó la concejala de Hacienda, Raquel Ruiz, a sus propuestas, que tildó de "populistas" por incluir reducciones de retribuciones a los concejales o la eliminación de subvenciones nominativas. No obstante, la última palabra la tendrán hoy los simpatizantes de Somos, que están convocados a las 19.00 horas a una asamblea en el palacio de Valdecarzana. Ellos decidirán con sus votos la postura que adopta el grupo municipal en el Pleno en el que se debatirá el presupuesto de 2016.

"El problema del PSOE es que no quiere cambiar de rumbo", sentenció ayer Primitivo Abella, concejal de Somos. Y añadió: "El gobierno no entiende lo que es negociar, les falta costumbre. Si te empeñas en defender tus propuestas de salida y no aceptas lo que dice la otra parte, el acuerdo es imposible. Demagogia y populismo es afirmar que defiendes los intereses de la ciudad y los demás, los propios. El presupuesto socialista cabalga sobre ciertas inercias objetivas: un núcleo de gestión directa cada vez más reducido y una periferia que proporciona servicios con empleo precario y que disipa recursos a favor de las grandes empresas".

Abella defendió el planteamiento realizado por Somos de cara a la negociación y rechazó la táctica del PSOE, "que pretendía que jugar al Monopoly". "El PSOE entiende la negociación de un presupuesto como una transacción en la que el gobierno incorpora una obra que el otro partido pide a cambio de su voto favorable. Se lamenta la concejala que no quisiéramos entrar a ese juego. En lugar de eso, pedimos medidas sencillas, objetivos posibles pero que implicarían un cambio de rumbo. Ése es el problema, no quieren cambiar de rumbo", afirmó el concejal.

Así, asegura Primitivo Abella, cuando la formación insta al gobierno a reducir las retribuciones de la Corporación, las transferencias a partidos, los gastos de protocolo y las subvenciones nominativas a los sindicatos UGT y CC OO y a la Fundación Princesa de Asturias es porque cree que en esas partidas "el recorte es posible" y genera fondos "para financiar una nueva ayuda social y crear dos puestos de trabajo".

"Si insistimos en el refuerzo de las brigadas municipales es porque las jubilaciones que se van produciendo en los puestos vinculados al mantenimiento de la ciudad no se cubres y eso nos lleva al abandono o a la privatización. Si pedimos que se reduzcan en un uno por ciento del presupuesto las externalizaciones es porque entendemos que con la gestión pública transformamos el beneficio empresarial en mejores condiciones laborales y más empleo y con ello mejora el servicio que reciben los ciudadano", explicó el concejal de Somos.