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El Ayuntamiento quiere sacar lustre al Palacio Valdés para que brille en su 25.º aniversario

Cultura proyecta un plan de limpieza de los oropeles y trabaja en un programa de actos que prolongue la fiesta hasta 2020

El Palacio Valdés, visto desde el pie del escenario.

El Ayuntamiento de Avilés se prepara para la celebración del vigésimo quinto aniversario de la reapertura del teatro Palacio Valdés. Sucederá el próximo año 2017. La fiesta se está gestando en la actualidad y los responsables de la política cultural de la ciudad ya tienen varias ideas claras: lustrar el interior del odeón -cuyos colores están apagados como consecuencia de un cuarto de siglo de constante uso- y diseñar, paralelamente, una programación continuada que alargue la fiesta hasta 2020, cuando se cumplirá el centenario de la construcción de un teatro que colocó a una ciudad de las afueras de las afueras en un centro de exhibición escénica de referencia nacional.

Para llevar a cabo estos dos proyectos la concejalía de Cultura trabaja en la consecución de un presupuesto que permita financiar la celebración. Asimismo, los programadores locales también preparan los espectáculos que se verán ya desde el año próximo sobre las tablas del edificio que terminó de levantar el arquitecto Manuel del Busto, cuando Avilés aspiraba a ser San Sebastián.

El teatro Palacio Valdés se reinauguró el 14 de noviembre de 1992. El Ayuntamiento, desde aquel año, no ha cesado en desarrollar obras de mejora. La intervención más larga en el odeón local se produjo en 2012. El teatro fue cerrado con el fin de instalar nuevos elementos de seguridad. La programación escénica, entonces, se trasladó al centro cultural de Los Canapés que, entre otras funciones, acogió el estreno nacional de "La lengua en pedazos", de Juan Mayorga, una obra por la que al escritor madrileño le concedieron el Premio Nacional de Literatura Dramática.

En este cuarto de siglo se han desarrollado también otro tipo de intervenciones que no precisaron alterar el calendario de representaciones: se cambió el peine de madera por uno de hierro (es la máquina que sustenta bambalinas, telones, focos?), se realizaron tres ampliaciones del foso de la orquesta (la primera se comió la primera fila de la platea, pero tal cual está actualmente puede acoger formaciones que pongan música a óperas de Richard Wagner, como ya sucedió con "La holandesa errante", en 2010), se ha cambiado también el sistema antiincendios, se ha instalado un ascensor con el fin de salvar las barreras arquitectónicas, se han reparado desperfectos en el suelo, se han cambiado los baños, se ha adecuado la escalera auxiliar, se han reparado goteras en la cubierta y se ha pintado en tres ocasiones la fachada principal. El Pleno del Ayuntamiento del pasado jueves, de hecho, aprobó un paquete de inversiones entre las que cabe destacar la instalación de una línea de vida en la caja escénica (un elemento de seguridad para los maquinistas que trabajan entre cajas). Lo que no se ha hecho nunca, sin embargo, ha sido meter mano a la decoración neobarroca ideada por Manuel del Busto. Hacia ahí va el proyecto del próximo año, según indica la concejala de Cultura, Yolanda Alonso.

El teatro Palacio Valdés es desde mediados de los años ochenta Bien de Interés Cultural. Sus obras se iniciaron en 1900, pero no concluyeron hasta 1920. Entre esa fecha y 1972 fue centro cultural privado (teatro y cine). Se cerró entonces y después de veinte años de espera reabrió. La restauración había comenzado en 1987 y fue reinaugurado con la representación de una zarzuela "El imposible mayor, en amor le vence Amor", del dramaturgo sabuguero Francisco Bances Candamo, un espectáculo que contó con la dirección de Emilio Sagi.

La historia del edificio está asociada al deseo de convertir la ciudad en un núcleo burgués a orillas del Cantábrico. Los hermanos Juan Carlos y Vidal de la Madrid rescataron la primera noticia periodística que hablaba del Palacio Valdés. Es de 1899 y salió publicada en "El Diario de Avilés". El doctor Claudio Luanco -el mismo fundador de las fiestas del Bollo- presidió la empresa que se encargaría de realizar la obra (las acciones se vendían a 500 pesetas y diez días después de publicarse la idea ya se habían apuntado las primeros 139 propietarios de la que luego sería Sociedad del Teatro). Las obras se iniciaron el 5 de agosto de 1900. Asistió a la ceremonia de la primera piedra Leopoldo Alas, "Clarín" (fallecería menos de un año después). La inauguración oficial fue el 9 de agosto de 1920. Entonces quien estuvo fue el otro novelista del Realismo español: Armando Palacio Valdés.

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