El desarrollo de la sociedad occidental ha dado pasos de gigante en las últimas décadas, si bien muchos de ellos implican vivir de espalda a la naturaleza. Esa deriva, según sostienen algunos especialistas médicos, genera diversos trastornos psicológicos y hábitos vitales perniciosos para la salud. Sobre esa base, el psicoterapeuta gozoniego Pablo Fernández plantea "una vuelta atrás", un retorno a los orígenes del hombre en el que la naturaleza sea el motor de los pensamientos y ayude a resolver los problemas cotidianos.
El especialista, que tiene consulta en Avilés y en Oviedo, desarrolla desde que comenzó el año una terapia con sus pacientes denominada "eco-sercoaching". "Eco viene de naturaleza; ser, de existencia; y coaching, de entrenamiento", explica el especialista, que tras realizar un concienzudo estudio ha comprobado que la naturaleza es un motor que "ayuda a encontrar el conocimiento y la sabiduría, y como tal sirve para resolver los problemas". Esta terapia no es nueva, admite, pero requiere de una revisión y de mucho análisis "teniendo en cuenta que actualmente la sociedad occidental vive colgada de internet, twitter y facebook; es decir, que la tecnología se sobrepone por encima de la naturaleza".
Para Pablo Fernández, lo mejor es echar la vista atrás para reencontrarse con el medio natural. Con la simple observación de los fenómenos naturales, afirma, los seres humanos pueden llegar a ordenar sus "malos pensamientos". "También el refranero ayuda: 'Después de la tormenta, siempre llega la calma', un dicho tan socorrido como real", indica.
El psicoterapeuta gozoniego pone como ejemplo para entender mejor su teoría el movimiento del sol. "El sol nace, llega a su momento álgido y posteriormente desciende; ese proceso puede aplicarse a la vida de una persona ante un problema determinado: lo que tenemos es que conocer y asumir la existencia de ese ciclo para comprender que no se puede estar siempre en un momento álgido", detalla Fernández.
Las terapias que dirige Fernández son grupales o individuales. "Hay que respetar las normas de la naturaleza y el ritmo de la vida; como dice una máxima budista: 'No empujes el río'", indica Fernández para expresar a continuación que cualquier lucha contra "los procesos naturales" en uno mismo puede provocar síntomas de estrés o depresión, que se corrigen admirando e intentando comprender la naturaleza. "Prefiero trabajar con procesos experienciales que con conceptos mentales y comprobé que la naturaleza ayuda a encontrar la inspiración para ser fuertes y flexibles", indica Fernández, que lo mismo trata a personas con principios de neurosis o estrés que a quienes preparan oposiciones.
