Usuarios del "búho" a Oviedo con motivo de las fiestas de San Mateo manifestaron su malestar por las deficiencias del servicio, que llegaron a calificar de "caos". Aquellos que intentaron regresar a Avilés en la madrugada del domingo tuvieron que esperar cerca de dos horas para conseguir plaza. Las colas para los autobuses a Avilés, Gijón y Pola de Lena estaban mezcladas, el servicio de seguridad no contribuyó a poner orden y se vivieron momentos de tensión que incluso llevaron a intervenir a la Policía Nacional, según explicaron varios afectados.