El retrato náutico es una "rara avis" en el mundo pictórico. Se trata de pinturas en las que la protagonista es siempre una embarcación, "estampada" por su autor al máximo detalle; característica que les ha valido para ganarse el sobrenombre de "cuadros de capitán". El Museo Marítimo de Luanco tiene en su haber una veintena de estas obras, datadas entre el siglo XVIII y XX, y la intención de su director, José Ramón García, es exponerlas al público "en las próximas semanas".

"Las pinturas en las que aparecen paisajes portuarios son muy habituales, pero los retratos náuticos, no lo son tanto. Por ello, y porque tenemos un buen fondo de estas obras, se nos ocurrió realizar una exposición con ellos", explicó García, sobre estas obras en las que destaca "la rigurosidad de los autores".

En su mayoría, estas fotografías tomadas con pincel fueron hechas por encargo de capitanes o armadores, de ahí la eminente importancia de la nave en el lienzo. "Siempre están tomados de perfil, y si te fijas bien, no hay ni un cabo ni una pieza que no esté en su sitio. Era lo que más importaba a sus poseedores", relató el director.

Actualmente, el museo luanquín cuenta con "unas veinte" pinturas de este género, una cifra ligeramente escasa para organizar una muestra, por lo que la intención de la dirección del centro es ampliar la exposición con obras "que se acerquen al retrato, aunque no lo sean estrictamente". "En la situación actual no podemos permitirnos pedir material a otras colecciones, porque consumiríamos muchos recursos. Por ello, la solución que hemos encontrado es incluir paisajes portuarios en los que las embarcaciones sean lo más fieles posible a la realidad", argumentó García.

Pese a que reconoce que la idea "aún está un poco en pañales", García y su equipo trabajan duramente para que la exposición pueda estar abierta lo antes posible. "Nos gustaría que estuviese disponible para mediados de noviembre, pero puede que vayamos un poco justo. Lo que tenemos muy claro es que vamos a esforzarnos para que se convierta en una realidad lo antes posible. Esperemos que para diciembre como muy tarde", sugirió el cabeza visible del marítimo.

Una de las muchas tareas que actualmente aborda la dirección del museo es trasladar algunas maquetas al Centro Niemeyer de Avilés para colaborar con la exposición "Los límites de la imaginación", inspirada en el escritor francés Julio Verne. "Estos días tenemos mucho trabajo porque nos han pedido varias maquetas para la muestra, y hay que hacerlas a conciencia, ya que se trata de piezas muy delicadas. Estamos a tope", sentenció García.