La defensa que realizó la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, de la concejala de Festejos, Ana Hevia, a quien le atribuyó "un error" que no justifica su cese, la hace "cómplice de las irregularidades", según los partidos de la oposición. Es un preludio de lo que ocurrirá el miércoles, día en el que el gobierno fechó el pleno extraordinario forzado por la oposición para reprobar a Hevia después de que un informe de Intervención determinara irregularidades en las facturas de Festejos por valor de unos 11.000 euros.

El portavoz del PP, Carlos Rodríguez de la Torre, ve "preocupante" la actitud de cerrar filas por parte del gobierno socialista. "Lo que tienen que hacer es ver y analizar el problema, pero no lo quieren resolver". Y añadió: "No hay bula para los políticos. Dicen que lo ocurrido no tiene importancia, pero que pregunten a las personas perjudicadas, que las hay, tienen problemas ante Hacienda por un hecho muy grave, la falsificación de sus firmas. Si eso no tiene importancia, ¿qué la tiene?".

Rodríguez de la Torre reprochó al portavoz socialista, Luis Ramón Fernández Huerga, por decir que la oposición intentaba vincular el gobierno a la corrupción. "Aquí no se habla de corrupción, el único que lo dice es Huerga. De lo que hablamos es de un error grave. Se puede dimitir por ineptitud, porque no eres capaz en el desarrollo de tu trabajo, y eso es lo que estamos diciendo". Por último el portavoz del PP reclamó respuestas para las dudas que despierta ahora la gestión de Festejos. "¿Cómo se van a programar la Navidad y el carnaval? ¿La única forma es cometiendo irregularidades?".

Duro también fue el portavoz de IU, Alejandro Cueli. "Mariví Monteserín prefiere convertirse en aliada de las irregularidades que quitarle las competencias a la concejala responsable de semejantes y sonrojantes chanchullos contables". En su opinión lo único que pretende Monteserín es "justificar lo injustificable, seguramente porque sabe que ella es la máxima responsable de poner al frente de Festejos a una concejala que durante años no tuvo escrúpulos en permitir la falsificación de firmas ni de utilizar los datos de indefensos ciudadanos para cuadrar sus trapicheos contables". En definitiva, considera que no está a la altura de la "regeneración democrática" que pide la calle.

Para la portavoz de Ciudadanos, Carmen Soberón, el gobierno no se puede escudar en que lo ocurrido fue un error. "Un error repetido tantas veces es una práctica. La concejala está en una posición muy delicada y debilitada, no creo que sea factible que permanezca, ya que además ha caído en una pérdida de confianza importante por parte de la oposición y también en ciertos ámbitos internos del Ayuntamiento, no creo que el área de Intervención esté muy satisfecha".

Soberón hizo un llamamiento a cumplir con rigor la normativa y aseguró que no ve motivos por los que el gobierno no pueda prescindir de esta concejala. "Es un enrocamiento que no entendemos a dónde va".

El portavoz de Ganemos, Agustín Sánchez, espetó: "Sus excusas las hemos oído todos estos años cada vez que aparece un caso de manejo irregular de fondos públicos. Ellos saben que hay que asumir responsabilidades, como ellos mismos se las exigen a otros partidos".

Las irregularidades en la contabilidad del área de Festejos salieron a la luz como consecuencia de que varios exintegrantes de la charanga "Los Diaños", un grupo fundado en el año 2000 y disuelto en el año 2011, descubrieron a través de sus datos fiscales que habían recibido un pago del Ayuntamiento de 2.200 euros en concepto de premio por su participación en los carnavales del año 2015. Y como no había sido así, investigaron y descubrieron que en los archivos municipales constaba un documento en el que figuraban sus datos personales y también su firma. Somos denunció esta situación, y la Alcaldesa decidió encargar un informe a Intervención para determinar lo ocurrido. Apoyada en una auditoría, la interventora presentó hace unos días el informe en el que se confirma lo que el gobierno admite como un error pero no de calado como para dimitir.