Un magistrado de lo contencioso administrativo del Juzgado número 6 de Oviedo ve inactividad del Ayuntamiento de Soto del Barco ante una demanda de ruidos de un vecino en referencia a las molestias causadas por la terraza de un céntrico bar de la capital del concejo. El local cuenta con licencia de ocupación de la vía pública.

El juez ordena a la administración local que de forma inmediata realice la comprobación oficial para determinar si la instalación supera los niveles de ruido establecidos en la normativa, y "en caso de arrojar un resultado positivo, el Ayuntamiento deberá adoptar las medidas para que cesen la emisión de esos ruidos tanto en horario nocturno como en el diurno".

La sentencia fechada el pasado 28 de febrero acepta las tesis del denunciante, que defendió desde el primer momento que el Ayuntamiento no solo debe conceder la licencia de apertura sino que es "competente para vigilar, controlar e inspeccionar las condiciones en las que fue concedida, entre ellas las que le han sido impuestas en relación con el ruido". La resolución judicial es definitiva, es decir, no cabe ningún tipo de recurso administrativo a un órgano superior. Es más, las costas judiciales también correrán a cargo de la administración local demandada. "El Alcalde debería pedir, al menos, disculpas", remachó el denunciante.