La vitalidad de las verdes hojas dentadas del roble de la calle González Abarca que ayer fue objeto de tala no se correspondían con el diagnóstico que los técnicos municipales realizaron del árbol, y que fue el que lo sentenció. Las pruebas realizadas con un tomógrafo determinaron que "más de la mitad de la sección tiene pudrición muy avanzada o hueco. La estabilidad del ejemplar está muy comprometida", según la interpretación de los técnicos.

El principal riesgo que recoge este informe es el de la probabilidad de vuelco, determinada como "muy alta", así como la "alta" probabilidad de fractura de ramas. "Se propone la tala del ejemplar con Urgencia 1", determina el informe. Muchos vecinos lamentaron la desaparición del frondoso árbol.