"Sin emoción no hay aprendizaje", señala Diego Rúa Vicente, tutor de primero de Primaria del colegio Santo Tomás y exalumno del mismo centro. Docente vocacional de los pies a la cabeza, coincide con sus compañeros del edificio de la calle González Abarca en señalar que "uno tiene que transmitir pasión".
Este entusiasmo ha llevado a este exfutbolista del Real Avilés y del Real Oviedo B a transformar el aula de los alumnos de seis años en la denominada "tribu del amor", de manera que los pequeños se agrupan, metafóricamente hablando, en cabañas que reciben nombres como "felicidad", "amistad", "familia", "cariño" y "alegría". Además, en el centro de la clase figura un fuego simbólico en torno al cual se reúnen cada día, al inicio de la jornada. "Tenemos que adaptarnos a los cambios y preparar a los alumnos para el futuro. En los próximos años cambiarán los contenidos y las destrezas, pero los valores seguirán estando ahí", destaca Javier Bueno, director del colegio Santo Tomás, institución religiosa con 297 alumnos y 25 profesores centrado en el aprendizaje cooperativo y en el desarrollo de las competencias de cada niño, añade.
El proceso formativo del Santo Tomás va más allá de impartir unos contenidos determinados; busca educar en y para la libertad, la convivencia, la responsabilidad o la justicia. Para alcanzar estos objetivos y la maduración y el crecimiento de los estudiantes desarrolla proyectos que se mantienen en el tiempo, como la emisora de radio, experiencia que alcanza la séptima temporada. Esta actividad está estructurada en tres niveles y, en ella, participan todos los alumnos, de Infantil a Secundaria "porque ayuda al lenguaje y a potenciar las habilidades comunicativas de los jóvenes", comenta Pablo Arrojo, profesor de pedagogía terapéutica.
La implicación de los alumnos en esta iniciativa es tal que incluso algunos ex, actualmente en la Universidad o que ya han finalizado esta etapa, continúan ligados a la radio, relata Javier Bueno, para añadir que en dicho proyecto, los estudiantes desarrollan todos los perfiles profesionales que rodean al medio; se meten en la piel de locutores, realizadores, documentalistas, técnicos de sonido... "No son niños o adolescentes imitando a adultos, están haciendo radio de verdad y elaboran un programa que se emite todos los viernes de 17 a 19 horas".
Dos proyectos igualmente con gran arraigo en el colegio son el de primeros auxilios y el de educación vial. "Ya en Infantil, los niños saben identificar una emergencia y llamar al 112; cuando finalizan Secundaria pueden practicar una reanimación cardiopulmonar", explica Alberto Fernández, profesor de Educación Física, materia que incluye la práctica de la escalada al contar el centro con un rocódromo. Este deporte, dice, "requiere precisión, coordinación y concentración". En cuanto a la educación vial, el Santo Tomás lleva años comprometido con concienciar a los jóvenes en esta materia. Asimismo, favorece el uso de la bicicleta y tiene en proyecto contar con un aparcabicis.
