Los ladrones se cebaron ayer con Luanco con el robo en el interior de dos vehículos. Los propietarios de ambos turismos presentaron sendas denuncias en el cuartel de la Guardia Civil de Gozón, que ha iniciado ya la investigación para dar con los presuntos ladrones. Ambas sustracciones se produjeron presumiblemente de madrugada y, a falta de contabilizar los daños, los dueños de los coches calculan que los artículos robados pueden sumar 710 euros en un caso y 500 en el otro. En total, 1.210 euros.

El procedimiento en ambas actuaciones fue diferente. En el primer vehículo, los cacos rompieron la ventanilla "con un objeto contundente", según expresaron ayer desde la Guardia Civil. Como consecuencia de ese impacto, pudieron entrar al interior del vehículo y sustraer, según el relato de los afectados, dos teléfonos móviles de alta calidad -un Iphone y un Samsung Galaxy-, además de una pulsera de oro. Los artículos están valorados en 710 euros. Según fuentes consultadas, el coche estaba estacionado en la zona de Las Escallejas.

Además, casi al mismo tiempo, los ladrones entraron en otro vehículo estacionado en la calle Ateneo Obrero de Luanco, en el barrio de La Vallina. En esta ocasión, y siempre según la versión de la Guardia Civil, los cacos cometieron un hurto ya que no se aprecian señales relacionadas con un posible forzamiento de la cerradura del coche o rotura de ventanas para acceder al interior del turismo. Una vez dentro del coche, consiguieron sustraer un ordenador portátil con su maletín y accesorios. Esos artículos están valorados en quinientos euros. Las denuncias fueron presentadas en el cuartel de la Guardia Civil de Luanco, pese a que uno de los dos afectados acudió primero a la sede de la Policía Local, ubicada en la céntrica calle de La Polar.

Estos hechos delictivos no suelen ser habituales en Luanco. Sin embargo, en Candás, la Policía Local de Carreño ha registrado tres intentos de robo en varios vehículos de la marca Opel entre los días 8 y 12 de este mes. En este caso, los ladrones no sustrajeron objeto alguno de los vehículos sino que su interés estaba en robar el vehículo en sí. En dos de las ocasiones, los cacos rompieron la ventanilla de los vehículos en cuestión y forzaron la cerradura y no tuvieron éxito a la hora de "hacer el puente" y escapar con el coche robado. Sin embargo, con otro sí pudieron; y se llevaron el coche desde la calle Gremio de Mareantes, próxima al cuartel de la Guardia Civil de Candás, para dejarlo después en un camino situado el entorno del polideportivo candasín y próximo al barrio de El Peñeo.