Las flores y la añoranza fueron las protagonistas durante todo el día en los cementerios de la comarca. La celebración de Todos los Santos reprodujo las habituales escenas de atascos y de mareas de flores que quedaron instaladas en los sepulcros y nichos como señal de recuerdo. Mañana las parroquias programan nuevas misas especiales con motivo del día de los Fieles Difuntos.