Las federaciones de cofradías de pescadores del cantábrico noroeste -Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco- apoyan la postura del Ministerio de Agricultura y Pesca de no cerrar el caladero de sardina el próximo año, como así proponen los científicos del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES). Además, abogan por un plan de gestión "a largo plazo" y piden un estudio para saber qué es lo que está pasando con esa especie.
Los representantes de los pescadores, reunidos en Burela, trasladarán hoy al secretario general de Pesca, Alberto López Asenjo, sus propuestas para 2018. Dimas García, presidente de la federación asturiana, explicó que otra de sus preocupaciones es la raya, cuya pesca está ahora cerrada. "Hemos acordado pedir que se abra ya para agotar las 52 toneladas que nos quedan hasta final de año. Se reparten unos 150 kilos semanales", explicó. En ese sentido, los pescadores propondrán para el año que viene una gestión trimestral de la raya e incluso poner cuotas semanales para conseguir que la pesca de esa especie "llegue para todo el año". Respecto a la xarda, las federaciones confían en que no baje el cupo más del 20 % anunciado.
