La portavoz del colectivo de trabajadores auxiliares víctimas de un accidente con mercurio en la fábrica de cinc de San Juan de Nieva, Dori Acevedo, calificó ayer como "mezquina y miserable" la negativa de Asturiana de Zinc, la propietaria del complejo, a pagar los 5.000 euros que supuestamente debe desde 2014 en concepto de realización de pruebas y consultas médicas de seguimiento a los afectados por la intoxicación que produjo el metal pesado. Acevedo afiló su crítica, que no es nueva, sabedora de que Azsa ha cerrado 2017 con unos resultados económicos muy positivos, con "enormes beneficios" y repartiendo entre sus trabajadores una prima de más de cinco mil euros por la consecución de los objetivos productivos.
"No hay nada que objetar a que el personal de Azsa cobre una generosa prima que han ganado con su esfuerzo, lo que resulta sangrante es que una compañía que gana millonessea tan ruin como para negar el pago de 5.000 míseros euros a una gente a la que envenenó y fastidió la vida", declaró la portavoz de los intoxicados con mercurio.
Dori Acevedo recalca que "cinco mil cochinos euros son una menudencia para una empresa como Azsa, pero representan una cantidad muy importante para gente que, como los enfermos por mercurio, han tenido incluso que prescindir de realizar pruebas médicas porque no tienen dinero para pagarlas". La portavoz del colectivo insiste en la existencia de situaciones de "apuro económico" y anima a colaborar haciendo aportaciones en la caja de resistencia abierta en Caja Rural de Asturias: ES85 3059 0087 5525 9827 2223.
