Avilés, Vicky FUERTES

Rufino Álvarez, «Rufo», lleva más de un cuarto de siglo ejerciendo de maestro en el Colegio Público Marcos del Torniello, donde ha conseguido que el voleibol sea el deporte rey. En 1991, con la ayuda de las AMPAS del colegio, fundó la Agrupación Deportiva La Curtidora, de la que ha sido presidente durante diecisiete años. En el 2008 abandona el cargo y es nombrado presidente de honor. En la pasada Gala del Deporte de Avilés, Rufo recibió el reconocimiento por su trabajo incombustible en el fomento del deporte base, una distinción que le ha llenado de satisfacción. Convencido de que el deporte es la mejor escuela para la vida, anima a todos los padres para que sus hijos lo practiquen.

-¿A qué le sabe el reconocimiento por su labor con el deporte base?

-Todos los reconocimientos saben bien y este por ser recibido en casa me hace sentir una gran satisfacción. Cuando era presidente de La Curtidora, en el año 2004, nos concedieron el premio al mejor club de Asturias y en el 2007 el premio Delfos. Fueron premios a nivel colectivo, pero este me sorprendió porque es personal y sobre todo porque sigo en activo. Además, ha sido muy grato compartir este premio con Lucio del Belenos o Girol, gente con la que tengo mucha relación desde hace años.

-Usted es toda una institución en el Colegio Marcos del Torniello, donde lleva casi tres décadas como maestro. ¿Cuál es en líneas generales el balance de todos estos años como docente?

-Siempre hay que hacer una valoración positiva y aquello que no fue tan bueno, olvidarlo. Sobre todo me quedo con el contacto que aún mantengo con antiguos alumnos y con el privilegio de poder ir aumentando el grupo de personas con el que te relacionas. Me satisface enormemente ver cómo los alumnos a los que he enseñado han encauzado su vida de manera correcta.

-¿Qué recuerda con especial emoción de estos años?

-Siempre me acordaré de aquel Campeonato de Asturias de atletismo que conseguimos con el colegio en infantil femenino, en 4x80. Estaban Rosa Madaleno, Cuca Bellido, Yoli Fernández, Florisel y Sonia.

-Usted comenzó enseñando fútbol sala y balonmano, ¿Por qué se pasó al voleibol?

-Empecé en Gijón en el curso 1978/1979 con el balonmano en el Colegio Público Lope de Vega y quedamos campeones de Asturias con el equipo alevín femenino. Luego me fui a Cataluña a trabajar y allí seguí ligado al balonmano y también al fútbol sala. Y es cuando llego al Marcos del Torniello cuando empiezo con el voleibol.

-¿Y cómo surgió la idea de crear la Agrupación Deportiva La Curtidora?

-La Curtidora nace de las AMPAS de los colegios Versalles y Marcos del Torniello, que querían hacer un club en el que tuvieran cabida los alumnos que al terminar su etapa escolar y no destacasen, pudieran continuar con el deporte. No queríamos fútbol ni baloncesto porque ya había muchos equipos, así que nos decidimos por el voleibol. Y aunque en un principio el club era para niñas y niños del barrio, bajaron chicas de La Luz y así empezamos en el año 1991 en el club y a su vez en el Marcos del Torniello.

-Tras 17 años como presidente, en el 2008 le nombran presidente de honor, ¿Cómo ve el futuro de la agrupación?

-Habría que distinguir dos apartados. Uno la base y otro el equipo senior. Con la base se está trabajando muy bien con entrenadores de mucho nivel como Dani Berrio o Gustavo Aramendi. Y respecto al equipo senior, hay menos posibilidades económicas y eso dificulta potenciar al equipo más arriba. Creo que la Primera Nacional es en estos momentos la categoría ideal. Es necesario que siga existiendo el primer equipo para que sea el referente de las más jóvenes.

-La Agrupación es el único club avilesino que se dedica al voleibol, ¿Por qué cree que no hay más?

-Creo que con uno es suficiente. No hay tantas chicas para practicar este deporte.

-¿Y por qué no hay sección masculina en La Curtidora?

-Lo hubo, pero el equipo se deshizo por falta de efectivos. Luego tuvimos varios intentos de hacer un equipo infantil, pero nos quedamos otra vez justos de niños. Esta es una de las asignaturas pendientes del club.

-¿Cómo vivió el ascenso a Primera División del equipo senior en la temporada 1998/1999?

-Fue algo muy curioso. Fuimos a jugar la fase de ascenso a Soria con la idea de participar y sin ánimo de hacer mucho más. Nuestra capitana de entonces, Inés Navas, no viajó porque le dimos permiso para ir al Campeonato Universitario, y para nuestra sorpresa conseguimos el ascenso.

-¿Qué cualidades debe tener una buena jugadora de voleibol?

-Creo que es fundamental una buena técnica. A eso hay que añadirle una tipología adecuada, cierta altura y excelentes condiciones atléticas. Que sea buena saltadora, flexible y, sobre todo, que tenga carácter competitivo.

-¿Son los colegios donde debería trabajarse la base del deporte para que luego los deportistas accedan a cualquier club?

-Si, sin duda. Hoy los colegios tienen todas las facilidades para poder favorecer la práctica del deporte entre su alumnado. Los monitores los pone el Ayuntamiento que subvenciona parte del coste de la actividad, pero nos encontramos con una barrera que es la disposición de las familias a la práctica deportiva de sus hijos por pura comodidad. Por que no quieren sacrificarse los sábados cuando sus hijos tienen que disputar partidos.

-Usted ha inscrito en el patio del Marcos de Torniello los nombres de los alumnos y alumnas que han destacado deportivamente, como Irene Alfonso, campeona de España de 800 metros. ¿Qué siente al ver sus logros?

-Un orgullo muy grande. En el caso de Irene me tocó vivir la final del Campeonato de España en Avilés, y cuando llegó a la meta sentí una alegría inmensa. Sin duda una carga emotiva muy grande.

-¿Qué le diría a los padres para que los niños practiquen deporte?

-Que el deporte es la mejor escuela para la vida.

El deporte es la mejor escuela para la vida y debe de empezarse en los colegios