Mieres del Camino,

David MONTAÑÉS

La cabaña ganadera de la comarca del Caudal ya se prepara para el inicio de la campaña de pastos, que arrancará en aproximadamente un mes. Se prevé que más de 20.000 cabezas de vacuno pertenecientes a los concejos de Mieres, Lena, Aller, Morcín y Riosa pasen el verano en los montes. Sumando ovejas, cabras y caballos, la cifra rondará los 30.000 animales. Si bien estos números pueden reflejar a simple vista un buen momento dentro del sector, lo cierto es que es un balance a la baja. En el plazo de poco más de un lustro, según los datos que maneja la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (SADEI), la comarca ha perdido más de 250 explotaciones ganaderas. En 2002 había en el territorio diez mil cabezas de ganado más que en estos momentos.

Pese al sostenido descenso del número de reses, los municipios de la comarca siguen buscando montes que permitan ampliar la reserva de pastizales. En la actualidad, los ayuntamientos del Caudal destinan a ese sector 95.000 hectáreas de terreno, de las cuáles el 75 por ciento se sitúa en los concejos de Aller y Lena. Por municipios, Aller se mantiene como el principal referente ganadero. La cabaña local está formada por 730 ovejas, trescientas cabras y 9.800 vacas. Lena también alberga una intensa actividad, con 1.600 ovejas, 270 cabras y 8.300 vacas. Mieres ya se encuentra lejos de estas cifras (1.600 ovejas, 130 cabras y 4.500 vacas), y más aún Morcín (setecientas ovejas, 95 cabras y 1.700 vacas) y Riosa (cien ovejas, 45 cabras y 1.700 vacas).