Mieres del Camino,

David MONTAÑÉS

El pulso entre la Policía Local de Mieres y el Gobierno de Aníbal Vázquez sigue tenso. Las discrepancias se centran ahora en la cobertura que debe ofrecer el 092, el servicio que teóricamente está activado para cubrir emergencias. El Sindicato Independiente de Policía Local de Asturias (SIPLA) denunció ayer que los agentes asignados a esta tarea han permanecido durante toda la semana movilizados en Turón para «vigilar que los críos del barrio San Francisco no jueguen al fútbol en los viales».

El sindicato de la Policía Local ha denunciado que la patrulla del 092 ha recibido órdenes directas, al menos durante la semana que ahora termina, de permanecer entre las seis y media y las ocho y media de la tarde en el barrio San Francisco «disolviendo» cualquier conato de partido de fútbol entre chavales del barrio. Los portavoces de la central consideran que con este tipo de servicios la cobertura del 092 queda desactivada. «Este semana hubo dos sucesos graves, como la caída de un niño a través del patio interior de un edificio o el traslado de una vecina con problemas cardiacos», apuntan los dirigentes del SIPLA, para a continuación exponen su posición: «Los agentes de servicio pudieron atender estas urgencias gracias a su profesionalidad y a la buena suerte, ya que si en ese momento estuvieran en Turón o patrullando a pie por cualquier zona del concejo hubieran tardado demasiado tiempo en llegar al lugar de los hechos».

Los dirigentes del SIPLA sostiene que el Gobierno local debe decidir si quiere seguir contando con el servicio del 092 o buscar otro tipo de modelo policial: «Lo que no se puede es ofrecer al ciudadano un servicio y luego impedir su funcionamiento, si lo que quieren es que los agentes hagan otras funciones, que están en su derecho, entonces que desactiven el 092», apuntan los representantes sindicales.

El Gobienro de IU ya ha dejado claro que quieren una Policía Local más próxima al ciudadano, con una mayor presencia en las calles. No obstante, este enfrentamiento transciende de un simple enfoque de competencias. El SIPLA y UGT denunciaron días atrás la negativa por parte del Ayuntamiento a que sus representantes utilizasen horas sindicales, una medida que ambas centrales consideraron como «muy grave» y por la que llevarán a los tribunales tanto al equipo de Gobierno como al concejal de Personal, Juan José Menéndez. La Policía Local también ha sido el servicio más castigado por el ajuste salarial. Desde entonces, prácticamente han dejado de poner multas y las bajas laborales se han disparado, lo que muchos interpretan como una protesta encubierta.