La plataforma de vecinos de Turón que han impulsado una campaña para que el topónimo del valle mierense no desaparezca de los documentos oficiales, como está sucediendo, presentará hoy un escrito en la sede de la Delegación del Gobierno. El requerimiento está avalado por algo más de 3.600 firmas. Los promotores de la protesta esperan que su esfuerzo tenga fruto, más tras la gestión que recientemente ha hecho el PP de Mieres para lograr que la Administración central escuche su demanda. Bastará que el Ayuntamiento traslade a la Delegación del Gobierno y al Instituto Nacional de Estadística (INE) una petición oficial para que Turón reciba el tratamiento de "entidad singular". De esta forma, los turoneses recuperarán su identidad perdida.
El Gobierno de Mieres ya ha informado a los vecinos de Turón de que están recabando la información necesaria para dar respuesta a los requerimientos exigidos por la Delegación del Gobierno. Pese a ello, la plataforma ciudadana sigue con su hoja de ruta. Las firmas recogidas durante el último mes se presentarán a primera hora de la mañana en el registro de la Delegación del Gobierno: "Cuando nos las compulsen presentaremos también una copia en el Ayuntamiento de Mieres", señalaron ayer los portavoces de la comunidad.
La Delegación del Gobierno en Asturias no sólo ha adelantado que la reclamación de Turón será atendida si así lo pide el Ayuntamiento de Mieres, además ha explicado los motivos por los que el nombre de Turón ha dejado de tener presencia en los documentos oficiales, incluido el DNI. Para entenderlo hay que remontarse hasta 2010. Según el INE, la Xunta de la Toponimia Asturiana envió ese año al organismo una revisión de los censos y padrones de la región. Este documento se trasladó al Ayuntamiento para su revisión y, posteriormente, se remitió a la Administración central para su aplicación. Pero la revisión, según parece, se olvidó de Turón y la informática hizo el resto. Por así decirlo, el valle minero desapareció del INE. Inicialmente este hecho pasó desapercibido, pero poco a poco se ha ido haciendo patente, generando un profundo malestar.
