Los municipios del Mieres, Aller y Lena hicieron ayer piña en defensa de la atención sanitaria en la comarca del Caudal. Ayuntamientos, partidos políticos, asociaciones de enfermos, entidades vecinales y profesionales del sector escenificaron un gran pacto para actuar en un triple frente. A lo largo de una intensa mañana de reuniones, que culminó con una concentración de protesta frente al viejo Hospital Álvarez-Buylla, se acordó rechazar la fusión sanitaria con la comarca del Nalón. Del mismo modo, todos coincidieron en solicitar que el servicio de hemodiálisis que ofrecerá el nuevo Hospital de Santullano sea gestionado por personal del centro y no por Cruz Roja, como pretende el Principado. Por último, también hubo unanimidad a la hora de pedir que el parking subterráneo del nuevo equipamiento comarcal tenga carácter gratuito.
El Hospital Álvarez-Buylla vivió ayer una jornada muy agitada. A las once y media decenas personas participaron en una concentración de protesta convocada por la junta de personal. No obstante, los representantes de los trabajadores arrancaron la jornada de movilización a las nueve de la mañana, con una reunión a la que asistieron los alcaldes de Mieres, Aller y Lena, además de representantes de grupos políticos. Los sindicatos trasladados a responsables municipales información sobre las consecuencias que, a su juicio, traerá la proyectada fusión sanitaria con el Nalón. El nuevo modelo que defiende el Principado deja al Hospital de Riaño como principal referente del territorio. "Todo indica que desaparecerán servicios y que los usuarios sufrirán importantes trastornos", señaló el alcalde en funciones de Mieres, Manuel Ángel Álvarez. El dirigente de IU también apoyó a la plantilla a la hora de reivindicar que el servicio de hemodiálisis sea cubierto por personal del centro: "Hay trabajadores formados y pedimos que la atención sea pública". El alcalde de Aller, David Moreno, también manifestó su apoyo a las reivindicaciones de los trabajadores: "No es el momento de abordar cambios en el mapa sanitario y el Hospital de Mieres debe mantener su actual peso específico". El regidor lenense, Ramón Argüelles se sumó al discurso de unidad: "La comarca debe tener un hospital de cabecera que mantenga todos los servicios y el empleo".
En la concentración que se celebró a las once y media de la mañana estuvieron representantes de la Federación de Vecinos de Mieres y de la asociación de enfermos renales Alcer-Asturias. La presidenta de la junta de personal del Álvarez-Buylla, Mercedes Vega, leyó un escrito reclamando que la hemodiálisis dependa de los facultativos del centro y que el parking del nuevo Hospital sea gratuito. Fue especialmente beligerante a la hora de criticar el plan regional de fusión de áreas sanitarias: "El Hospital de Mieres perderá servicios al pasar a depender del Valle del Nalón, muchos trabajadores serán desplazados y la comarca sufrirá las consecuencias con un empeoramiento de la atención sanitario y la pérdida de puestos de trabajo", señaló Mercedes Vega.
Los alcaldes de Mieres, Aller y Lena tiene previsto reunirse el lunes con la consejería de Sanidad para analizar la situación que genera preocupación a nivel comarcal.
