Los ladrones de cobre han vuelto a actuar en Mieres, y de nuevo perjudicando a clubes deportivos. Como ya sucediese en los dos estadios del casco urbano, el Mundial 82 y el Hermanos Antuña, ahora se han cebado con el Club Deportivo Ujo. Los delincuentes se apoderaron en la madrugada del pasado viernes de 400 metros de cable de cobre de la instalación eléctrica del campo municipal de Ujo. La entidad puso de inmediato una denuncia ante la Guardia Civil, y al ser un espacio municipal, hizo lo propio ante el Ayuntamiento de Mieres y la Policía Local.

La directiva del club explicó que el robo se produjo en la madrugada del jueves al viernes de la pasada semana. "Cuando llegamos al campo vimos las arquetas levantadas, y que nos habían fastidiado la instalación", señaló Domingo Rodríguez, coordinador deportivo del club. En concreto, unos 400 metros de cable de las acometidas y las tomas de tierra. "Menos mal que no se llevaron el cable de las torretas, porque el destrozo podía haber sido mucho mayor", relató resignado.

Además del gasto económico de la reparación, que se presupuestó en unos 2.500 euros y que de momento ya ha asumido el Ayuntamiento de Mieres como propietario del campo, el robo del cable también provocó bastantes quebraderos de cabeza al club durante el fin de semana y a lo largo de esta semana hasta que se arregló la avería el miércoles.

"Nos vimos obligados a suspender partidos que se tenían que jugar de noche, también tuvimos que suspender entrenamientos, y para que la gente se pudiera duchar con agua caliente tuvimos que hacer un empalme con el hogar de pensionistas para poder echar a andar los bombos", indicó el directivo, que espera que los hechos no vuelvan a repetirse.