Villaviciosa

Villaviciosa vive con los ojos puestos en el cielo y en el río Linares. Los vecinos temen que las lluvias propias del otoño y del invierno hagan que se repita la pesadilla que ya vivieron en junio, cuando la localidad sufrió una de las mayores inundaciones que se recuerdan al coincidir el desbordamiento del río con una marea viva en la ría.

Las administraciones se pusieron entonces a estudiar las causas de aquel desastre, que, por fortuna, sólo dejó daños materiales. Las culpas parecen ser del nuevo paseo fluvial, inaugurado meses antes, que, en lugar de aliviar las aguas en momentos de caudal abundante hacia los terrenos del Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (Serida), provocó que fluyeran incontroladamente a la zona de Les Colomines, tomando gran altura incluso en La Oliva.

El alcalde de Villaviciosa, Manuel Busto, y los concejales de Obras, Xicu Díaz, y de Urbanismo, Rogelio Estrada, se reunieron con el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, para exponerle los trabajos que la oficina técnica municipal consideraba prioritarios para evitar futuras inundaciones. Después de cuatro meses, la ejecución de algunas de estas obras no se ha iniciado. Eso sí, la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) lleva aproximadamente un mes reparando las estructuras de encauzamiento, con labores de limpieza en el río Linares, y reforzando las márgenes. La inversión para acondicionar la zona dañada por la gran riada ronda los 200.000 euros y se prevé que finalice dentro de un mes. Pero no hay visos de nuevas actuaciones, como rebajar la cota de la senda. El concejal de Obras, Xicu Díaz, asegura que la próxima semana prevén retomar los contactos con las administraciones implicadas para acelerar el proceso. Confirma que, de momento, no se ha desarrollado ninguno de los trabajos planteados.

Por parte de la oposición, el portavoz del grupo municipal socialista, Manuel Tuero, considera que «es prioritario limpiar el Puentón porque uno de sus ojos está taponado. Llegamos a noviembre, que es cuando suele haber agua abundante, y seguimos igual». Insta tanto a la Confederación Hidrográfica del Norte como a la Demarcación de Costas a «tomar medidas» con celeridad y agrega que «hay que presionar para que se tomen medidas a tiempo». Tuero asegura que el PSOE de Villaviciosa está haciendo «lo imposible para que se actúe» y critica al Gobierno local por no haber presentado el informe técnico elaborado tras las inundaciones en el momento de la inauguración del polémico paseo del río Linares.

Mientras, los vecinos de Villaviciosa temen que se repitan las lluvias intensas y que sus viviendas y sus negocios se inunden de nuevo. Esta situación se vive con especial preocupación en el barrio de Les Colomines. Allí, Inmaculada Ordieres no oculta su «miedo a que vuelva a llover fuerte» porque afirma que, «con un poco que caiga, viene todo para acá». Otra vecina, Adela Uría, agrega que incluso se retrae de pasear por la senda porque son habituales los «bichos» como culebras y ratones. Urge a ejecutar mejoras y cree que «hay que dragar el río». Carmen Simón, que se vió con su casa encharcada, también opina que las obras deben realizarse «cuanto antes». Ángeles Pumarada es más crítica y alerta de que «cualquier otro día viene otra inundación. Es una vergüenza cómo lo tenemos. Estamos abandonados, como si no fuéramos de la Villa».

Mientras, los responsables públicos estudian las recomendaciones de los técnicos y, entre las posibles actuaciones, destacan la rebaja de la cota de la senda fluvial, como indicó el presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Jorge Marquínez, con motivo de su visita a la zona. También se plantea sustituir los puente de Huetes y del Puentón, para dar más fluidez al cauce, y levantar una barrera de protección en La Barquerina, entre el parque y la carretera, y un muro en Les Colomines y otro entre La Alameda y Amandi. En total, el coste de estas infraestructuras se estima en 3,3 millones de euros.