Pola de Siero,

Manuel NOVAL MORO

El gobierno municipal de Siero ha decidido cambiar la ordenanza de recogida de basura y residuos aprobada por unanimidad por el Pleno en lo tocante al uso de cubos en las comunidades de vecinos de las zonas urbanas. El alcalde de Siero, el casquista Eduardo Martínez Llosa, explicó que, una vez concluido el plazo para presentar alegaciones, el municipio recibió seis, y entre las cuestiones sobre las que se solicitaban cambios estaba la de posponer la obligatoriedad de los cubos. De las seis alegaciones, dos son de asociaciones de vecinos, dos de partidos y dos de vecinos a título particular.

La razón aducida por los vecinos en las alegaciones está en que falta tan sólo un año para que venza el contrato de concesión de la actual empresa que se encarga de la recogida, y por ello parece más lógico esperar ese tiempo y prever en el próximo contrato que sea la empresa la que se encargue de hacer las gestiones con los cubos.

La ordenanza recogía que los vecinos de las comunidades debían ser quienes se encargasen de gestionar los cubos. En primer lugar, son los propios vecinos quienes tienen que adquirirlos. A continuación, deben sacarlos a partir de las nueve de la noche en verano y de las ocho en invierno, y retirarlos una vez hayan sido vaciados, así como encargarse de su limpieza.

Para ello, podían contratar a una empresa con un coste aproximado de tres euros al mes por vivienda. Este sistema se emplea desde hace años en Lugones y ha tenido una gran aceptación entre los vecinos. Todas las comunidades tienen contratada a una empresa que cada noche se encarga de sacar los cubos y que por las mañanas los retira y los limpia para devolverlos de nuevo al atardecer.

No obstante, pese a esta aceptación en Lugones, algunos vecinos de otras partes, como los de la Asociación «Berrón 77», no estaban de acuerdo con asumir la gestión de los cubos o el coste que implicaba dejarlo en manos de una empresa. También estaba en contra el Partido Independiente de Siero (PINSI), que presentó alegaciones pidiendo que se pospusiera la medida.

Martínez Llosa dijo que, aunque la norma fue aprobada por unanimidad, la respuesta de muchos vecinos ha ido en el sentido de esperar a que se renueve el contrato de la empresa, y el equipo de gobierno «quiere ser participativo».

El gobierno municipal esperará entonces un año para incluir la gestión de los cubos en los próximos pliegos de condiciones de la empresa de recogida de basura y, de este modo, desvinculará a los vecinos totalmente de la responsabilidad, al menos en el manejo de los cubos. Otra cuestión es el coste que vaya a tener incluir este servicio en la tasa de basura.