Las reliquias de San Juan de Ávila llegaron ayer a la iglesia parroquial de San Félix de Lugones. El apóstol de Andalucía fue declarado nuevo doctor de la Iglesia por el papa Benedicto XVI en octubre de 2012. Por este motivo la diócesis de Córdoba solicitó a la Santa Sede la gracia de celebrar un año jubilar Avilista, concediendo las pertinentes indulgencias plenarias a todos los fieles que en este año se acerquen al santuario de Montilla o veneren las reliquias del santo, que están peregrinando por toda la geografía española.

El santuario de Montilla abrió la posibilidad de solicitar la visita de las reliquias y el párroco de Lugones, Joaquín Serrano, cursó la petición «ilusionado, aunque sin mucha esperanza de tener el honor de recibirlas. Los sacerdotes responsables del evento se pusieron en contacto conmigo y me hicieron saber que sólo esta parroquia de Oviedo había presentado la petición», comentó el sacerdote, orgulloso de haber logrado traer los restos del santo.

Las reliquias llegaron ayer por la tarde a Lugones y a partir de las ocho tuvieron lugar una recepción en el templo y una vigilia de oración que estaba previsto que continuara durante la noche. Medio centenar de personas asistieron al acto religioso. Hoy al mediodía tendrá lugar una misa, seguida de procesión, oficiada por el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes.

Las reliquias de San Juan de Ávila consisten en el corazón y la clavícula del santo. El apóstol es el patrón del clero español. «Es alguien que nos aglutina a todos los sacerdotes en nuestro carisma y nuestra misión», destacó el párroco de Lugones, para quien la recepción de sus reliquias supone «algo fuera de lo común; me agrada mucho que estén en Lugones».