La mejor bebida de nueva expresión de Asturias volvió a ser, al igual que el año pasado, 1947, del lagar local Viuda de Angelón, según determinó ayer en Nava el jurado del Concurso a las Mejores Sidras y Derivados de la Manzana elaborados en la región y que este año desarrolló su tercera edición en pleno auge. Este certamen se encuadra dentro de los actos del Festival de la Sidra, que este fin de semana celebra los días grandes de su fiesta.

El premio de la espumosa brut se lo llevó la bodega Martínez Sopeña Hermanos, de Villaviciosa, con su bebida Emilio Martínez, y el de espumosas heterogéneas, el lagar Macrile con su Sidra Norniella. El licor dulce Fanjul fue considerado el de más calidad en la categoría de aperitivo de manzana y los Diamantes de Grusifás, en la de hielo, como en la edición anterior. El vinagre de Llagar de Oles, de Martínez Sopeña Hermanos (Villaviciosa) también repitió y volvió a ser el más valorado, al igual que el aguardiente de Salvador del Obispo, de la casería San Juan del Obispo, en Tiñana (Siero), fue el que volvió a triunfar.

Participaron 28 bebidas, un número superior al de anteriores ediciones, y fueron valoradas por el comité de expertos formado por seis miembros de la Asociación de Sumilleres: David Barro García, Carlos Velasco Acebal, José Ruiz de la Peña, Juan Granda Rivero, Jesús González Fuente, José Cao y el director de la cata, Ceferino Cimadevilla. Este último destacó que el consumo de bebidas que está en alza es el de sidra espumosa y de hielo. El de nueva expresión se estabiliza.

El jurado puntuó las sidras teniendo en cuenta tres fases. La primera fue la visual, con 15 puntos, y que tiene en cuenta la limpidez, color (intensidad, matiz y tonos), fluidez y el carbónico. En el segundo paso se tienen en cuenta las cuestiones olfativas, valoradas con 30 puntos en total, y en la que se aprecia la limpieza o franqueza, carácter, intensidad, calidad y armonía. La última fase es la gustativa y la que más puntúa, con 40. Se destaca el ataque o primera impresión, la evolución (estructura, alcohol, acidez y taninos), postgusto y armonía. Por último, la impresión final tiene reservados 15 puntos.