Javier Pintado Piquero tiene dos pasiones. La más conocida es la política, que ahora ocupa la mayor parte de su tiempo en su condición de portavoz municipal de Somos. Pero no es menor su otra pasión: la que siente por el bobsleigh, un deporte minoritario en España en el que Pintado ha sido primero practicante y, ya retirado, seleccionador nacional.

"Todo comenzó en 2009. Yo practicaba deportes de inercia, y el bobsleigh es un paso lógico una vez que evolucionas. Así que me apunté a un campus de la Federación Internacional. Teníamos que ser dos y busqué a un amigo. Finalmente no pudimos ir, pero comenzamos a entrenarnos para competir", relata Pintado.

El bobsleigh ganó al sierense desde un primer momento. Tanto que se propuso un objetivo más ambicioso que el de poder competir en alguna prueba oficial: sentar las bases de una estructura estable de este deporte en España. "La idea, desde un primer momento, era que el equipo superase a los personalismos. Porque los proyectos que había habido antes dependían de una persona, y cuando lo dejaba, se acababa", explica el sierense.

Tras un primer año de preparación, Pintado comienza a competir en la temporada 2010/2011. Su objetivo era llegar a los Juegos Olímpicos de Sochi, que se disputaron en 2014. Pero tras dos temporadas compitiendo, una lesión le arrebató el sueño olímpico.

"Ya tenía una edad y era complicado que pudiésemos llegar a Sochi, pero es que, además, me rompí la rodilla. Y una vez que sabes que no vas a llegar, es absurdo seguir", afirma el sierense. En ese momento, en colaboración con la Federación Española de Deportes de Hielo, empieza a trabajar en la estructura del equipo nacional.

Cuatro años después, ya se aprecian los frutos de ese trabajo. Pintado se desplazó la semana pasada a Lillehammer, en Noruega, donde el gallego Martín Souto representó a España en los Juegos Olímpicos de la Juventud. Pero además cuenta con equipos estables en categorías masculina y femenina, y en parabobsleigh, un deporte paralímpico que será olímpico en 2022 y en el que destaca el avilesino Israel Blanco. "Creo que en parabobsleigh y en el equipo femenino tenemos opciones reales de llegar a los Juegos Olímpicos de 2022. Y hablo de llegar para competir", dice Pintado.

Pese a la notoriedad que ha alcanzado el equipo jamaicano con su experiencia en el bobsleigh, incluso inmortalizada en una película, Pintado toma otro país como referencia: Gran Bretaña, donde, como en España, no hay circuitos. "Han obtenido grandes resultados, incluso con títulos y medallas en campeonatos mundiales. Y no tienen circuitos, que son inasumibles económicamente tanto aquí como allí, sólo pistas de entrenamiento para las salidas ", explica Pintado.

Estas pistas de entrenamiento son unas rampas de cien metros, con un ancho de tres, para entrenar las salidas, que son cruciales en bobsleigh. "Cada décima que pierdes en la salida, son tres en meta", explica. Años atrás, el propio Pintado trató de impulsar una pista de entrenamiento en Siero, con el apoyo del Consejo Superior de Deportes (CSD). "No tuvimos apoyo del gobierno local", lamenta. Pese a todo, Pintado no piensa en impulsar medidas que beneficien a su deporte desde su cargo político. "No quiero mezclar una cosa con la otra", sentencia.