El Museo Antón quiere abrir más sus puertas si cabe. Por ello, la familia del polifacético artista carreñense ha propuesto a la dirección del centro la organización de visitas guiadas para colectivos, empresas y agrupaciones de la región. Hasta el momento se han llevado a cabo tres de estos itinerarios guiados, y han resultado ser un "auténtico éxito".
"Me pareció buena idea organizar una visita guiada con mis vecinos de Dormón, para que conocieran bien la obra de Antón y el museo. Me puse manos a la obra y, con la inestimable colaboración de Dolores Villameriel, directora del centro, convenimos un encuentro para los parroquianos. Para mi sorpresa, la actividad gustó, y mucho", relata Alberto García, sobrino del Antón y miembro de la junta rectora del museo.
Tras el éxito, en la cabeza de García se empezó a cocinar una idea: la de promocionar la vida y obra de Antón a través de las visitas para colectivos que, generalmente, no son el perfil de visitante del museo. "Como fue bien con los vecinos, decidí invitar a una serie de empleados de la cementera Tudela Veguín, en la que trabajé durante más de 50 años. El resultado volvió a ser el mismo, todo el mundo quedó encantado", repasa.
El afán y tesón de García -"soy un hombre que se cansa difícil"- por promocionar la colección de su tío hicieron que su cabeza estuviese barruntando continuamente la idea de iniciar un nuevo tipo de excursiones al museo. A la cementera y a los vecinos de Dormón, le siguieron unos trabajadores de Montrasa-Maessa y, en cuarto lugar, una comitiva de la familia paterna de Antón.
"A los familiares también les gustó mucho la iniciativa. Pudieron conocer más a fondo el porqué de la obra de nuestro pariente, y fue la excusa perfecta para reunirnos todos", asegura García sobre la concentración, en la que participaron unos 50 parientes; desde sobrinos del artista hasta bisnietos de un primo del escultor.
Aunque el sobrino de Antón ha puesto toda la carne en el asador para que estas iniciativas salgan adelante, reconoce que gran parte del éxito de las mismas es gracias a la directora del centro, Dolores Villameriel. "Es una mujer que conoce mejor que nadie la obra de Antón, y además es muy didáctica. Sabe cómo llegar al público y organiza las visitas siguiendo un orden cronológico que hacen más comprensible la obra de mi tío", recala García.
Precisamente, la cabeza visible de la colección, Dolores Villameriel, ve con buenos ojos impulsar este tipo de iniciativas "más aún cuando vienen por parte de un miembro de la familia de Antón". "En el museo siempre pusimos nuestra mirada en el turista que venía de fuera, no poníamos tanto empeño en captar a gente de la propia región. Los teníamos tan cerca que simplemente pensábamos que ya vendrían", explica la directora del centro carreñense.
Precisamente, desde la dirección del museo están percibiendo un cambio en el perfil de visitantes que reciben, ganando peso el turista autóctono. "Desde que pusimos en marcha la página web sí vemos son más los asturianos que solicitan visitas guiadas. Cuando buscar información de Candás encuentran el museo y deciden acercarse a conocerlo", señala Villameriel
Sobre las visitas ya realizadas y organizadas por García, la directora coincide en que fueron un "éxito". "Vemos claramente que es un formato que está gustando. De hecho hemos recibido alguna carta de agradecimiento por la visita, un gesto que agradecemos enormemente", afirma.
Está previsto que el próximo 23 de abril visiten el museo Antón los miembros de la asociación de vecinos de Perlora, y que en mayo lo hagan los de Albandi. Para el mismo mes García también tiene planeado reunir a la familia materna del Antón. "Todavía no está todo confirmado, pero espero que seamos más de 40", aseguró.
