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El tirón del Martes de Campo llega a Siero

El comercio local aprovecha la afluencia de visitantes por la festividad ovetense para sacar a la calle sus productos

Alicia Fernández Ramos en su tienda de la Pola. MANUEL NOVAL MORO

La tienda de moda infantil Cocó lleva abierta tres años en la calle Martín de Lugones, pero solo unos pocos días al año se convierte en parte del trajín callejero del mercado de la Pola. Son los martes en los que la asociación Comercio Local de la localidad organiza la iniciativa "Tiendas a la calle" para ofrecer en el exterior de sus establecimientos productos de temporada o de rebajas como si se tratase de puertos de mercadillo.

Alicia Fernández Ramos, que junto a su hermana María es la responsable de la tienda, asegura que la iniciativa tiene mucho éxito cuando coincide con una fecha como la de ayer, la del Martes de Campo de Oviedo. "Cuando es Martes de Campo se nota muchísimo, viene mucha más gente y se vende más, es de los mejores días del año", asegura.

Efectivamente, acude a Pola de Siero mucha gente de Oviedo, y también está toda esa población flotante que, sin residir en Oviedo, trabaja en la capital del Principado y ese día celebra la fiesta local. Comercio Local aprovecha siempre este tirón, y todos los años tiene muy buena acogida.

Respecto a su establecimiento, Alicia Fernández Ramos dice que abrió la tienda, sencillamente, "por el momento en el que estábamos". Ella trabajaba en una tienda de Roberto Verino que cerró y animó a su hermana para que la acompañase en esta aventura.

Lo de decantarse por ropa infantil se debió, sencillamente, a una cuestión de gusto. "Decidimos poner la tienda porque nos gustaba la ropa", dice. Lo cierto es que en la Pola había ya varias tiendas de moda infantil, algunas muy asentadas, pero ellas querían ofrecer otro tipo de ropa. "Buscábamos otro estilo, sobre todo otras marcas que no te podías encontrar en las tiendas de aquí", explica.

Y aunque tirar por un comercio de estas características es siempre duro, sobre todo al principio, las hermanas Fernández Ramos resisten en un sector difícil y con una competencia férrea. Y los martes, como corresponde a un negocio de la Pola, tienen sus mejores oportunidades. Especialmente aquellos en los que se mezclan con los vendedores del mercadillo y se convierten en uno más de la nutrida oferta callejera del pueblo.

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