El reloj marcaba las 10.40 horas de la mañana cuando el humo empezó a salir de la sala de calderas en el colegio San José de Calasanz de Posada de Llanera. Un empleado municipal que se encontraba realizando trabajos en las inmediaciones del centro se percató del inicio de un fuego en la parte baja del edificio y dio la voz de alarma a la directora. Tras intentar sofocar las llamas con un extintor, y ante la gravedad del asunto, la encargada de la escuela decidió dar aviso a los servicios de emergencia y evacuar el colegio. Al lugar del suceso se desplazaron efectivos de la Policía Local, Protección Civil, Bomberos y una ambulancia. Gracias a la rápida intervención de los agentes y de los profesores no hubo que lamentar heridos.
Afortunadamente, todo esto fue parte del simulacro que se llevó a cabo ayer en el San José de Calasanz, y que supuso el colofón a la "Semana integral de la autoprotección", que se celebró durante toda la semana en el centro llanerense. "Hay que felicitar a la directora porque fue un rotundo éxito. En un minuto y medio se lograron desalojar los edificios de Educación Primaria e Infantil. El proceso fue fluido y no hubo ningún tapón", aseguró Fernando Crespo, técnico de Protección Civil del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias.
Además, para poner a prueba a los participantes, los técnicos del 112 habían escondido un muñeco en uno de los baños que también debía ser evacuado, y que fue llevado al punto de encuentro junto al resto de los alumnos por uno de los docentes. Pese a ello, y a que dos escolares padecen movilidad reducida, el centro educativo logró reducir en 30 segundos su tiempo con respecto al mismo ejercicio hecho el año pasado.
Pese a la diligencia con la que actuaron tanto profesores como alumnos, se encontraron algunas deficiencias tanto en el centro como en sus inmediaciones. Y es que las dos bocas de incendio más cercanas al San José de Calasanz y a la escuela infantil Bernardo Sopeña no funcionan, según anotaron los bomberos. Tampoco es correcto el sentido de apertura de las puertas del edificio de Educación Infantil, que se abaten hacia adentro, cuando debería ser hacia afuera. Fuentes municipales confirmaron ayer que el motivo de la falta de riego en las tomas que deberían haber utilizado los servicios de emergencia se debe a que éstas no están conectadas a la red de aguas, fruto de su mala construcción, por lo que será necesaria la realización de obras para ponerlas en funcionamiento.
"Es muy importante estar preparados para este tipo de situaciones. Además, estuvo bien que lloviese, porque es bueno que surjan imprevistos en estos casos", aseguró Mercedes Velasco, directora del colegio. "La idea de hacer una 'Semana integral de la autoprotección' fue una propuesta de la Consejería de Educación y, aunque ya habíamos hecho un simulacro durante el primer trimestre y éste no nos pillaba muy bien de fechas por ser finales de curso, decidimos involucrarnos" Fue muy interesante recibir formación en estos ámbitos, tanto para los profesores como para los alumnos", agregó Velasco.
