La Comarca de la Sidra fue ayer una fiesta enorme con varios focos sobresalientes de celebración. Simultáneamente, tuvieron lugar festejos en distintos rincones de los concejos que la integran, entre los cuales destacaron los actos en la localidad maliayesa de San Justo, la conmemoración de Santiago en Sariego y la ya clásica cita naveta de La Magdalena en Ovín y Buyeres.
En el caso de la localidad maliayesa, la jornada estuvo marcada por la procesión, que tuvo lugar después de la misa celebrada en la capillla, en la que tomó parte el Coro de voces graves de Gijón. Momento solemne de una fiesta que por la tarde disfrutó de una carrera de cintas a caballo que sirvió para reposar la resaca de dos verbenas multitudinarias que tuvieron su máximo esplendor en la noche del viernes con la actuación de los grupos "Panorama" y "Paris de Noia". Celebraciones que hoy mismo continúan con una comida al mediodía, en el restaurante Nuevo Busto, juegos infantiles, a las 17,00 horas, y una cena campestre, que comenzará a las nueve de la noche. El broche a los festejos no llegará hasta mañana, con una parrillada y una última verbena a cargo del grupo "Tekila", ya por la noche.
No menos animado estuvo el fin de semana en Sariego. Las fiestas de Santiago llevaron en la noche del sábado a una multitud al prado de la fiesta para disfrutar de la actuación de los incombustibles "Medina Azahara", así como de una verbena de la orquesta "Nueva Banda". Para recobrar fuerzas, unas 300 personas degustaron ayer una parrillada organizada por la comisión de festejos y, justo después, se celebró la octava edición del "Rural Prix", un concurso de juegos con toque tradicional que arrancaron numerosas carcajadas a los asistentes. Estas celebraciones tendrán hoy su despedida con una misa al mediodía, en honor al patrón, y el día del socio, con verbena incluida, a partir de las ocho de la tarde.
Menos concurrida, pero tanto o más disfrutada fue la fiesta de La Magdalena que festejaron de manera íntegra durante el día de ayer los vecinos de las localidades navetas de Ovín y Buyeres. Fueron 168 las personas que asistieron a la comida de confraternización que tuvo lugar a continuación de la procesión, en la que no faltó la música de gaita. La puja del ramo invitó a varios vecinos a tomar parte en una cita en la que tampoco faltó la celebración de un partido de fútbol amistoso en el que los solteros y los casados midieron fuerzas. El resultado era lo de menos.
Una jornada festiva que generó una gran satisfacción entre los organizadores. "Fue un rotundo éxito, tanto por el día que hizo como por lo bien que lo pasamos en la comida", explica Florentino Miranda, uno de los promotores de unos festejos que el año que vienen estarán de doble enhorabuena. "Celebraremos los 25 años, así que será un poco más especial de lo normal", destacó Miranda, que también quiso poner el acento en la capacidad de un pueblo tan pequeño para organizar una fiesta y otras muchas actividades que giran en torno a un colectivo incansable.
"La asociación de vecinos cuenta con 163 socios, y gracias a ello podemos organizar diferentes actividades, como excursiones a lo largo de todo el año", señaló el vecino y entusiasta de un proyecto común que muchas pequeñas localidades asturianas quisieran para sí.
