El club de golf de La Fresneda echará el cierre definitivo a principios de julio. La constructora propietaria de los terrenos, Los Álamos, informó a los representantes de los abonados del club, encabezados por Rufino Díaz, su intención de no continuar con la actividad del campo. La razón aducida por la empresa es que tiene previsto urbanizar la zona en muy breve plazo y necesita los terrenos.
Con estas previsiones, la constructora consideró que no sería lógico permitir a los socios que legalizasen las instalaciones -que están sin licencia desde su apertura, en 1996- y volviesen a utilizar el campo para después quitárselo dentro de unos pocos meses.
La constructora le cedió al club durante todo este tiempo los terrenos en precario, y este año informó de su intención de desarrollar urbanísticamente esa zona.
Entretanto, surgieron los problemas legales relacionados con la carencia de licencias, que, no obstante, se habrían solucionado si la constructora hubiera accedido a prorrogar el uso del campo de golf por más tiempo.
Los abonados del club, después de tomar contacto con varios promotores interesados en su reflotamiento, se dirigieron al Ayuntamiento de Siero para tratar de legalizar la situación de las instalaciones, y supieron que estos trámites no serían complicados. Se aferraban a la posibilidad de que la promotora desarrollase los terrenos a medio plazo, y no a corto, como ahora han constatado. Una vez tomada la decisión sobre el futuro de las fincas, la suerte está echada definitivamente para el campo de golf de La Fresneda.
"Sabíamos que cuando ellos decidieran iba a ser así; la decisión ya está tomada y nosotros no vamos a hacer nada más, porque si la promotora no quiere no podemos hacer nada; lo tenemos asumido y estamos cada uno buscando a ver dónde puede jugar; no hay más que agradecerles los más de veinte años que estuvimos aquí jugando", concluyó Rufino Díaz.
